Quake sigue vivo
Esto no es una afirmación nada loca ni sin fundamentos, pues últimamente parece que se ha disparado el número de títulos que buscan recuperar la esencia de los shooter clásicos de los 90s. Estamos viendo muchos juegos nuevos creados en motores de la época, sin ir más lejos hace poco os enseñábamos por aquí Ion Fury, hecho con Build Engine, y ahora vamos con WRATH: Aeon of Ruin, que está hecho con el Quake Engine.
Y no tengo absolutamente nada en contra de que se hagan juegos nuevos con estos motores, que aunque viejos, están adaptados a tecnología más moderna, permitiendo juegos todavía más grandes y mejores. Así pues, vamos a ver que hemos encontrado en esta versión de acceso anticipado de tan solo 2 niveles.
El Quake Engine en pleno 2020
Una de las cosas más fantásticas de WRATH: Aeon of Ruin es que usa el mismo motor que se usó en aquella época, pero obviamente adaptado a estos tiempos modernos, pudiendo exprimirse aún más si cabe en muchos términos.
Por raro que parezca, voy a empezar dejando claro que el apartado gráfico es glorioso (siempre y cuando te guste lo «retro»), las texturas en pixel y los modelos de pocos polígonos, es algo que rápidamente ya nos va a tocar en la nostalgia. La diferencia es que esta vez nos encontramos con una imagen nítida de alta resolución, buenas sombras e iluminación dinámica entre otras mejoras, incluso resoluciones 4k y formatos 21:9.
También incluye diferentes filtros, paleta de colores por software, multiplicación de pixel (para conseguir un look más retro), diferentes antialias, etc.
En términos de rendimiento… Bueno, poco que decir, +200 fps en resolución 4k con una GTX 1060 de 6GB. Es un título que prácticamente vuestra tostadora podría correr, como es de esperar. De todas formas, os dejo los requisitos por seguridad, tanto los mínimos como los recomendados, y si tu PC no cumple los mínimos, plantéate cambiar al siglo XXI.
En cuanto a dirección artística, sí que puede que notemos que los dos niveles actuales se parecen demasiado en cuanto entorno, y las texturas son ¿las mismas?, haciendo una ligera sensación de repetición que por suerte se ve paliada por la jugabilidad.
Frenetismo y gore se dan un fuerte abrazo
Puede que seamos muchos los que amamos esta clase de juegos por su jugabilidad frenética y, normalmente, el factor gore. Son títulos para disfrutar, sin mucho misterio de fondo, unas buenas horas reventando enemigos y desestresarte. Por suerte, WRATH: Aeon of Ruin, cumple con estos 2 objetivos a la perfección.
El gore no es que sea difícil de cumplir, en cuanto haces que meterle un escopetazo a un zombi sea un show de brazos volando y sangre, o que todos los enemigos exploten dejando sus partes por ahí volando y un buen salpicón de sangre.
Respecto al gameplay frenético, tampoco es difícil de conseguir, ya que usa el mismo motor de Quake 1, por lo que transmitir esas sensaciones, no lo tiene tan complicado, aunque sí que con algún plus al tratarse de esta época. El movimiento es fluido, muy fluido, y bastante rápido. Contamos incluso con el clásico «bunny hop» si somos jugadores más expertos.
En esto también ayuda bastante el diseño de niveles, que si bien es caótico en cierta medida, tiene una buena mezcla de espacios abiertos y cerrados, que equilibran la sensación de libre movimiento.
Un pequeño arsenal
Algo importante en este tipo de juegos, aparte de lo comentado que es prácticamente el núcleo del juego, se trata de los sistemas que este nos ofrece para aniquilar los enemigos o permanecer nosotros con vida.
En cuanto a armas contamos con una espada mística que aniquila todo lo que se le cruce en el camino, y cuenta con un ataque especial cargado que nos permitirá impulsarnos, tanto en tierra como en el aire, mejorando la movilidad.
Y el resto es un arsenal de armas de fuego, desde un «revolver escopeta» inicial, pasando por la escopeta clásica de 2 cañones, ametralladora de pinchos hasta un lanzador de bombas ácidas. Todas las armas tienen su situación más adecuada para su uso, ya que todas cuentan con un disparo secundario. Durante esta fase beta que he jugado, si que es cierto que por ejemplo, la ametralladora, necesitaría un repaso, ya que se siente casi inútil incluso con el disparo secundario, pero se prevén cambios en la versión final así que poco que añadir.
Luego, como extra tenemos los artefactos, que nos darán habilidades de manera temporal como por ejemplo robar vida a los enemigos, o unos pequeños segundos de invulnerabilidad. El más especial es el «Soul Tether», que crea puntos de control en cualquier momento por si morimos. Según el menú para seleccionarlos, habrá bastantes más en la versión final.
Por último, si inspeccionamos bien el mapa encontraremos secretos, armadura, vida, municiones… como todo buen clásico.
Enemigos: poca variedad mucha cantidad
Hasta el momento hay pocos enemigos y estos se repiten entre los 2 niveles existentes, pero sin embargo esto se balancea metiendo muchos enemigos en pantalla. Por mucho que haya repetición, venimos a pegar tiros, por lo que yo al menos, prefiero precisamente más cantidad que variedad.
La gran mayoría de los enemigos además son cuerpo a cuerpo, exceptuando 2 enemigos que tienen ataques a distancia. Se suelen matar bastante bien, especialmente si aprendemos a usar nuestro arsenal y movilidad, haciendo que incluso los enemigos más duros nos duren solo un par de disparos. También según la hoja de ruta, se añadirán un par más junto a los niveles, así que bueno, hasta el momento este aspecto, pues digamos que sencillo.
Conclusiones
Al ser una versión en acceso anticipado tampoco es que quiera desmigar mucho más, por lo que quiero esperarme a tener la versión final para comentar. Muchas de las cosas que comente ahora podrían cambiar completamente.
WRATH: Aeon of Ruin es un juego prometedor si te gusta el shooter clásico, pero clásico de verdad. De momento se irá actualizando en diferentes fases durante el acceso anticipado, centrándose en su campaña, dejando el modo multijugador para el último momento.
Frenetismo, jugabilidad fluidísima, buen sonido y música y esa mentalidad de shooter clásico, hacen de este título algo a tener en cuenta, tanto ahora como de cara a un futuro. Habrá que ver cómo evoluciona, que, sin duda, os traeremos un análisis de su versión final.
*De acuerdo con nuestra política, informamos a nuestros lectores que este título ha sido analizado gracias al envío de una copia de prensa por parte de StridePR.