Monster Hunter Rise – Análisis

Monster hunter Rise analisis

Monster Hunter Rise se convierte por méritos propios en la entrega más rápida, fluida y directa hasta la fecha.

Para los que somos veteranos en la saga Monster Hunter, cada nueva entrega que llega a nuestras manos significa volver a casa. Monster Hunter simboliza regresar a un hogar que no siempre tiene el mismo aspecto porque la estructura puede cambiar, puede tener añadidos y quizás remodelaciones o rasgos distintos que podríamos considerar peores o mejores que los que estaban antes. Pero al fin y al cabo sigue siendo nuestro sitio porque la esencia siempre está ahí. La aldea, sus gentes amables que nos esperan siempre con saludos y sonrisas, nuestra querida forja, las comilonas antes de cazar, la zona de reuniones donde hemos vivido momentos inolvidables… Desde que puso un pie en la industria, Monster Hunter es la emoción de prepararse para cazar, la ilusión de encontrar nuevos compañeros en el camino, la sorpresa de toparse con el material que necesitabas para esa armadura tan guay y el subidón de serotonina al abatir a un dragón legendario ya sea solo o junto a tus amigos. 

Y si como yo hay tantos cazadores fieles a esta saga es porque Monster Hunter nunca perdió su magia. Con cada lanzamiento ha habido pequeños cambios y algunos experimentos que habrán gustado más o menos, pero resulta imposible declarar que hay un Monster Hunter malo. Es lo que tiene haber creado la fórmula perfecta, que puedes añadirle diferentes sabores y presentaciones sin que pierda ni un ápice de calidad. Y no solo eso, porque con World también se demostró que sabe ir a más, ser más grande, más divertido y, lo mejor de todo, más accesible para que nuevos jugadores entren en este universo sin miedo. Os cuento todo esto porque ahora es el turno de Monster Hunter Rise de demostrar que la magia sigue ahí. Es el último paso de la bestia imbatible de Capcom. ¿Cómo de grande será la huella que deje en este mundo? Equipaos con vuestras mejores armas y armaduras porque vamos directos hacia la aldea de Kamura para descubrirlo. 

Kamura nos da la bienvenida a todos

Lo primero que hay que saber sobre Monster Hunter Rise es que nuestro nuevo hogar se llama Kamura. Se trata de una acogedora aldea que funciona de maravilla para introducirnos un inédito mundo ambientado en el Japón feudal al que se le ha puesto muchísimo cariño. Tanto es así que podéis esperar por adelantado combatir contra monstruos inspirados en leyendas japonesas, comida típica del país nipón, música con instrumentos tradicionales, armaduras ninja, templos y un porrón de detalles que utilizan la cultura japonesa como un fantástico telón de fondo para esta épica aventura. 

Pero antes de embarcarnos en peleas titánicas contra bestias feroces hay que conocer a los vecinos, los puestos y todas las posibilidades que nos ofrece Kamura. Monster Hunter Rise comienza con una buena dosis de charlas con la gente de la aldea para que los más nuevos vayan familiarizándose con los conceptos básicos y la estructura del título. Se presentan cosas como la tienda donde comprar materiales útiles, a los herreros que nos fabricarán armas y armaduras si les llevamos el material necesario, la cocina para obtener bonificaciones antes de la misión, las hermanas encargadas de darnos dichas misiones… Para los que vienen de juegos anteriores casi todo les será familiar y no tendrán problemas en dar los primeros pasos. No obstante, los que quieran iniciarse en el noble arte de apalear dragones estarán cubiertos y tendrán a su disposición todo tipo de tutoriales específicos y toda la información y consejos que necesiten para avanzar sin miedo a equivocarse. En este sentido he de decir que, pese a que World podría ser fácilmente la mejor puerta de entrada a la franquicia, Rise también se siente perfectamente accesible para nuevos jugadores sin experiencia previa gracias a nuevas implementaciones que tiran por la borda cualquier elemento mínimamente tosco o confuso heredado del pasado. 

Monturas, redes y perretes

Si he dicho que a los experimentados casi todo les será familiar es porque hay un “casi” en el que se engloban una sustanciosa cantidad de implementaciones y mejoras de calidad de vida. Para empezar ahora también tendremos perros como camaradas en la lucha, aquí conocidos como Canyne. En la batalla nos ayudará junto a nuestro felyne (el gato, vamos) y nos permitirá montarlo como si fuese un caballo y desplazarnos a una velocidad vertiginosa por el mapa. El simple hecho de contar con este perro cambia y mucho la forma en la que se afrontan las misiones y los combates, pues ahora nos podemos mover con muchísima más agilidad y mecánicas como la recolección de objetos ahora se hacen en menos de un segundo. A lomos del canyne podremos utilizar nuestros objetos mientras nos movemos y podremos recoger materiales sin necesidad de bajarnos e incluso en carrera. De esta forma, además de permitir curarnos o afilar nuestro arma mientras esquivamos ataques, también hace más fácil y rápido que nunca reunir hierbas, picar en minas, rebuscar en huesos… pues en apenas unos segundos puedes hacerte con montones de ingredientes, aunque solo sea mientras te desplazas de una zona a otra en medio de una caza.  

La otra gran novedad que también destaca por añadir velocidad y agilidad al juego es el cordóptero, un insecto que siempre llevaremos con nosotros y con el que podremos impulsarnos en el aire y realizar movimientos especiales. Por lo general tendremos un par de cargas de cordóptero que se irán recargando unos segundos después de cada uso. Estas cargas pueden utilizarse para movernos por el aire con una red cual Spiderman o para realizar un ataque único que variará según el arma que portemos y que hará un daño distinto al normal. Esto desemboca en un Monster Hunter en el que la norma es encadenar varias volteretas por el aire con saltos dobles y hasta triples, trepar paredes, impulsos en el último segundo para esquivar y varias combinaciones de acrobacias que suelen terminar en escenas espectaculares cargadas de acción y golpes aéreos. 

Por si esto fuera poco el cordóptero también ofrece la posibilidad de montar a los monstruos y utilizarlos para combatir contra otras criaturas o estamparlos contra muros para aturdirlos. El método es bien sencillo: cuando hayamos hecho una cantidad de daño suficiente con los ataques de cordóptero, la bestia quedará atada por nuestras redes y podremos hacernos con el control de sus movimientos y habilidades. Por supuesto, el tiempo que podremos montarlas es limitado, por lo que es necesario gestionar que hacer a continuación. Esto aporta capas de profundidad y estrategias muy interesantes en los combates. Como siempre habrá varios monstruos en un mismo mapa una opción será montar a nuestro objetivo y llevarlo hasta otro monstruo cercano para pelear contra él y obtener materiales de las partes que rompamos de su cuerpo. Y si queremos aprovechar al máximo la montura podemos encadenar otra montura más si estrellamos nuestro monstruo contra otro y saltamos del actual al ahora aturdido para controlar a este y repetir la jugada inicial a la inversa.  Suena un poco difícil, pero en la práctica es increíblemente simple y ofrece más opciones y dinamismo a los combates. No será raro que, por ejemplo, en mitad de una pelea contra un Tetranadon aparezca un Lagombi, empiecen a darse guantazos y aproveches que uno quede aturdido para montarlo y comenzar una nueva lluvia de hostias monstruosas a tu favor.  

También tenemos las nuevas misiones de frenesí, que se resumen en una especie de tower defense en el que tendremos que desplegar y usar ballestas, cañones y demás armas para detener oleadas de monstruos antes de que rompan las defensas de Kamura. No son nada del otro mundo, pero añaden un poquito más de variedad al título. Tiene su puntito estratégico y se disfrutan bastante más si vas bien acompañado de aliados con los que cooperar y pensar jugadas para cada horda de bestias.

Mucho que cazar, solo o con amigos

Ya que estamos hablando de los monstruos a nadie le sorprenderá que diga que son la estrella principal del título. Existen en torno a unos 34 monstruos y subiendo. Como era de esperar vuelven los favoritos del público como Rathalos, Rathian, Khezu, Tigrex… pero también hay nuevas incorporaciones como el mortífero Zinogre Apex, el Valstrax Carmesí y el monstruo insignia de esta entrega: el letal Magnamalo. Respetando la costumbre comenzaremos cazando monstruos más “pequeños” y no tan fuertes hasta que escalemos rangos y vayamos cazando criaturas que nos destrozaran la barra de vida de un plumazo. Nada nuevo bajo el sol, cada bicho tiene su estrategia, sus movimientos y es cosa nuestra aprender sus patrones, saber cuando cubrirse, esquivar y cuando atacar para que caiga. Todas las cacerías son super divertidas y algunas bestias en concreto nos harán sudar de lo lindo en las misiones más avanzadas. Si tengo que quedarme con un favorito ese tiene que ser Magnamalo. Su diseño es increíble, pelear contra él es intenso, muy exigente y además viene acompañado con un tema de combate que probablemente sea de lo más épico que he escuchado en la saga. De verdad, es una pasada. 

Y aunque cazar estos monstruos es genial en las misiones en solitario, la verdadera chicha está siempre en el multijugador. Nunca está de más recordar que Monster Hunter es de las mejores experiencias cooperativas que puedes probar en un videojuego y ahora es más accesible que nunca gracias a su llegada a todas las plataformas ( eso si, que no haya cross-save ni cross-play entre plataformas es de cárcel). Lo importante es que en Rise sucede lo mismo que con los antecesores, que se convierte en una excusa perfecta para reunir a las amistades y partirse de risa o pasarlo de miedo con la tensión de tener solo 3 vidas para cargarse un bicho descomunal entre todos. Porque al final Monster Hunter es lo que es, reunirse los findes con colegas y compartir el perfecto ciclo jugable de cazar, recoger materiales, usarlos para crear mejor equipo para matar monstruos más difíciles y vuelta a empezar.  

Una BSO preciosa y una localización de 10

Tampoco le romperé los esquemas a nadie si comento que el resto de apartados siguen estando a la altura de lo esperado. Ya solo en lo sonoro Rise saca pecho de forma orgullosa con una banda sonora sublime con emocionantes melodías para las batallas y unos preciosos temas vocales en japonés que nos harán disfrutar de cada paseo por Kamura. Y eso me recuerda que cuenta con un muy buen doblaje tanto en inglés como en japonés y sin dejar de lado la opción de dejar que los personajes hablen con los gruñidos raros de toda la vida. Aunque en esta ocasión no existe un doblaje en castellano, la localización a nuestro idioma es sobresaliente. Cada diálogo, cada descripción, cada título de encargo, todo rebosa un cuidado y un amor por parte del equipo de traducción que no hace más que mejorar aún más nuestra estancia en este magnifico título. No vais a poder quitaros de la cabeza los ingeniosos juegos de palabras y los chistecitos tontorrones que rondan por la aventura. ¿Uno destacable? El encargo titulado “Tiene huevos la cosa”. Es un 10/10 y matrícula de honor

En lo que respecta a gráficos y rendimiento sobra decir que el salto a las consolas grandes y PC ha conllevado una notable mejora en la resolución del título y en todo el conjunto técnico del juego. Destacan unos 60fps sólidos y necesarios y unos modelos de personajes y escenarios en los que se aprecia un mayor nivel de detalle respecto al lanzamiento original en Nintendo Switch. Si bien Monster Hunter Rise no exprime al máximo la potencia de las consolas actuales si que es innegable que rinde y se ve de auténtico lujo. 

Es el mejor momento para unirse a la caza

Monster Hunter Rise es, en cierto modo, lo mismo de siempre, pero mejor que nunca. Parte de una base tan perfecta como es la fórmula de Monster Hunter y procede a espolvorear añadidos, nuevas mecánicas, desarrollar aún más sus sistemas… es una entrega digna y junto a World es la mejor hasta la fecha. Son palabras mayores, si, pero esta franquicia jamás ha estado en tan buena forma y tan abierta al público. Entrar en su universo ahora es mucho más ágil, rápido, accesible y atrayente. Rise sube un peldaño más la calidad, pero si tengo que quedarme con algo es que es más fácil que nunca que nuevos jugadores den el paso para descubrir por qué Monster Hunter es tan querido por los cazadores viejos como un servidor. Es la oportunidad perfecta. Da igual en que plataforma actual juegues, si Monster Hunter te interesa, esta es la mejor oportunidad que tienes para descubrirlo. Nos vemos en Kamura.

Conclusión

Monster Hunter Rise consigue mejorar y pulir aún más una fórmula que de por sí lleva siendo un núcleo perfecto desde el primer momento. Con Rise ahora todo es mucho más veloz, mas accesible, más divertido. Es un título imprescindible para los jugadores habituales de la saga y una oportunidad de oro para cualquier persona mínimamente interesada en esta franquicia. 

9

De acuerdo con nuestra política, informamos a nuestros lectores que este título ha sido jugado gracias al envío de una copia de prensa por parte de PLAION EspañaSe jugó la versión de PlayStation 4.