El estudio gallego Ao Norte se engullece en anunciar que, en tan solo 1 hora, Tiny Garden alcanzó su objetivo en la primera campaña de Kickstarter del estudio con más de 200 backers, siendo un gran éxito para un equipo tan pequeño haciendo un juego tan diminuto.
Los mecenas pueden conseguir una copia digital del juego para Steam o Nintendo Switch en la campaña. También hay recompensas exclusivas y limitadas, como aparecer en el juego con un retrato de sí mismos con el estilo artístico del juego, tener la oportunidad de dibujar su nombre en el juguete, como hacía Andy en Toy Story, o incluso conseguir un viaje a Galicia con todos los gastos pagados.
Tiny Garden es una experiencia riquiña (la forma de traducir wholesome y cozy de Ao Norte), en la que el jugador tendrá que plantar, cultivar y cosechar verduras de juguete para intercambiarlas por más semillas y piezas de mobiliario con las que personalizar su pequeño juguetes. Tiny Garden busca recordar a esos juguetes de plástico de los 90, con unas mecánicas de juego que representan un juguete mecánico real.