De vuelta por la región de Alola
Situémonos en el año 1997. Mientras muchos de nosotros ocupábamos nuestras tardes con las aventuras de Son Goku, Ranma 1/2 y Oliver y Benji -Capitán Tsubasa-, unas simpáticas criaturitas irrumpían en nuestros hogares con una nueva serie animada que enamoró a los televidentes de la época. Se trataba de Pokémon, una serie de animación de procedencia nipona que en tan solo unos meses se convirtió como por arte de magia en fenómeno de masas. Tal fue la aceptación de este anime que tan solo dos años después, tras haberse estrenado en Japón en 1996, llegó a nuestro país su adaptación a los videojuegos bajo el título ‘Pokémon Azul’ y ‘Pokémon Rojo’. Este acontecimiento marcó un antes y un después en la historia de los videojuegos. Hoy en día, este humilde comienzo se ha convertido, más de veinte años después, en todo un fenómeno social a nivel mundial.
A estas alturas, ¿quién nos los conoce? Pondría mis manos en el fuego sin llegar a quemarme al decir que, en prácticamente cualquier rincón del mundo, por recóndito que sea parezca, podría encontrar algo relacionado con Pokémon incluso aun habiendo pasado más de dos décadas por ellos. Esto me termina dejando bastante claro de que cosas como estas, hacen que siga creyendo plenamente en «el poder de los videojuegos», ya que por muchos años que pasen por estas franquicias, independientemente de cuál sea tu edad, tu idioma, sexo, raza, religión o país, empresas como estas aún siguen y seguirán haciendo palpitar -al igual que en sus inicios- los corazones de cualquier fan, dejando bastante claro que el universo Pokémon no tiene fronteras.
[dropcap]P[/dropcap]okémon Ultrasol y Ultraluna es una de esas increíbles aventuras que nutren ese maravilloso universo y que tan solo un año después del lanzamiento de Pokémon Sol y Luna nos devuelve a la misteriosa región de Alola. Su penúltima aventura mostraba al jugador una nueva propuesta para la saga de videojuegos. En ella nos presentaban una nueva región, mostrándonos un nuevo y desconocido mundo cargado de peculiaridades, como los nuevos movimientos Z, pulseras y un buen número de Pokémon autóctonos y formas exclusivas de la región. Eso sin contar las novedades que hicieron que esa nueva entrega tuviera muy buenas críticas en el mercado.Después de meses de espera, Pokémon Ultrasol y Pokémon Ultraluna por fin están disponibles para las consolas de la familia Nintendo 3DS, preparándose para irrumpir en una campaña navideña cargada de duros competidores marcando un punto y final de la franquicia en esta plataforma. Una aventura que a priori se muestra como una nueva aventura de la franquicia pero, sin embargo, para la crítica no termina de parecerle eso. Neutral a cualquier opinión, volví a coger mi mochila, elegí mi mejor equipo Pokémon y me apresuré a embarcarme en una nueva aventura en este maravilloso universo, lleno de secretos y, sobre todo, combates por ser el mejor entrenador de una región que, aunque me parezca conocida, tenía muchas ganas de recorrerla de nuevo.
En primer lugar quisiera detallar que no soy un fan incondicional de la saga ni nada que se le parezca. Casualmente juego y he jugado a varias entregas con las que me he divertido muchísimo, sobre todo subiendo de nivel a los Pokémon y luchando contra otros entrenadores en campeonatos online propiamente dichos. Personalmente, y disculpadme si soy demasiado directo, soy de los piensan que a la franquicia le hace falta un pequeño refresco, sentarse a plantear cosas nuevas, reflexionar y quitarle esa etiqueta que les hace quedar como repetitivo. Aunque también soy de los que dicen que «si algo funciona, ¿para qué cambiarlo?».
Pues bien. Como comenté al principio, Pokémon Sol y Pokémon Luna marcaron un antes y un después en la afamada franquicia. Las novedades incorporadas en este título hicieron la boca agua a los fans. Pokémon Ultrasol y Pokémon Ultraluna no iban a ser menos y, aunque volvemos a una ya explorada región de Alola, los chicos de GameFreak, el equipo en esta ocasión encargado para su desarrollo, nos tenían guardadas alguna que otra sorpresa para la vuelta a esta región, que ya de por sí estaba cargada de secretos que quedaban por descubrir.
Re-explorando la región de Alola
Tengo que decir que jugando a Pokémon Ultrasol y Pokémon Utraluna me he sentido como si estuviera viviendo en un «deja vu» constante hasta llegar a determinado punto de la aventura. Al igual que en Sol y Luna, nuestra premisa es realizar el recorrido Insular participando en pruebas por las distintas islas que componen la región de Alola, donde los aspirantes a entrenador Pokémon realizarán una serie de pruebas a través de combates contra entrenadores y sus poderosos Pokémon Dominantes. A todo esto le sumamos las apariciones del Team Skull que, liderados por Guzmán, siguen haciendo de las suyas por la región. Hasta este punto apreciaremos pocos cambios en la trama principal de la aventura.
Volviendo al recorrido Insular. Aunque este nos parecerá similar, añade ligeras diferencias respecto a Sol y Luna. La nueva entrega sufrirá algunas variaciones respecto a su antecesor en cuanto a localizaciones de los jefes y Pokémon de los que disponen en los combates.
Pero no solo recorreremos Alola. Ahora también tendremos la posibilidad de visitar la mismísima Ultrópolis, una ciudad situada en el Ultraespacio a la que Necrozma ha arrebatado la luz sumergiéndola en las tinieblas, dando lugar a un nuevo capítulo argumental centrado en el misterioso Pokémon. Los Ultraumbrales, portales a otros mundos repartidos por la región de Alola que visitaremos a lomos de los Pokémon Legendarios Solgaleo o Lunala, también darán paso a darnos la oportunidad de capturar un buen abanico de Pokémon Legendarios de otras generaciones con los que completar nuestra Pokédex.
Pequeños detalles que marcan la diferencia
Hasta aquí, todos los contenidos de los que he comentado os parecerán más o menos similares a los de Pokémon Sol y Luna si no fuera por las nuevas localizaciones y el nuevo capítulo centrado en la trama argumental del Pokémon Necrozma, la pieza angular de toda esta maraña de sucesos. Sin embargo, los chicos de GameFreak pensaron en incorporar pequeños detalles tanto técnicos como jugables, que convierten a este título en una versión definitiva de su antecesor.
Además, tal y como comenté anteriormente, en Pokémon Ultrasol y Ultraluna, tendrémos la oportunidad de viajar a otros mundos a través de los Ultraumbrales. A través de ellos, a modo de minijuego en el que iremos recolectando células de energía, podremos atrapar a Pokémon Legandarios dependiendo de nuestra edición. De la cantidad de células recolectadas dependerá de la distancia recorrida en el ultraumbral y por consiguiente, la posibilidad de encontrar a uno de los Pokémon Legendarios que aparecen en su respectiva edición.
Para finalizar, y hablando brevemente de uno de los detalles del postgame, se muestra algo más interesante que en su antecesor. Además de la trama argumental del Pokémon Necrozma, se desbloqueará un nuevo capítulo de la aventura donde el Team Rainbow Rocket, compuesto por personajes míticos de la franquicia como Giovanni, Magno, Aquiles, Helio, Ghechis y muchos otros, se batirán en duelo contra nosotros a través de una serie de desafíos. Un contenido que apriori no nutre la historia principal pero sí que amplía las horas de juego tras completar la historia principal.
La versión definitiva de Pokémon Sol y Luna
Pokémon Ultrasol y Pokémon Ultraluna se presenta como una versión definitiva de su antecesor Sol y Luna. En esta ocasión Nintendo ha añadido a la base que ya tenían formada nuevas formas, funciones y alguna que otra nueva localización a la región de Alola, así como nuevas características jugables y una trama algo más profunda con alguna sorpresa por descubrir. Aunque para muchos os parezca una expansión del título original, para mí la vuelta a la región de Alola me ha sido bastante grata. Descubrir los nuevos secretos, la trama argumental centrada en el Pokémon Necrozma y sus distintas formas, o luchar contra antiguos enemigos del Team Rainbow Rocket con la nostalgia que ello conlleva ha sido una experiencia bastante divertida; todo esto sin olvidarme mencionar que volver al mundo Pokémon, como siempre, es una oportunidad que nadie debe rechazar.
*Siguiendo nuestra política de actuación, este análisis ha sido posible gracias a la copia de prensa cedida por Nintendo España.