Acción ciberpunk con un toque de arte pixelado.
Los juegos con temática ciberpunk tienen su público establecido y no suelen complicarse en su posicionamiento, sin embargo, como todo juego independiente es necesario experimentar un poco más, razón por la cual Lightning Games ha decidido sazonar Anno: Mutationem con un estilo de arte pixelado que nos rememora la bella época de los 32 bit.
Con todo lo anterior, hace falta un estilo de juego que cohesione la historia de ciencia ficción que nos propone, ya que a primera vista es fácil caer enamorado por su estilo de arte de anime/manga.
Su historia sabe sembrar la intriga
La narrativa nos pone en los zapatos de Ann Flores, una mercenaria que sufre una extraña enfermedad que causa que pierda el control y ataque a todos los que la rodean. Sus amigos y familiares hacen todo lo posible en ayudarla en encontrar una cura, un día su hermano Ryan desaparece, mientras seguía una pista sobre una medicación para Ann.Nuestra protagonista es una altamente entrenada en combate, detective, barmaid y mujer independiente. Por lo que decide ir tras el rastro de su hermano, con el progreso de la aventura nos enteramos que hay una enfermedad llamada virus Mekánica que afecta a las personas modificadas con partes biónicas y los vuelve seres de limitada inteligencia.
Viajaremos de la gran metrópoli Skopp a Noctis, entre otras locaciones, mas, la investigación empieza a revelar un misterio mucho más grande que incluso podría afectar el destino de todo el planeta.
La narrativa sabe jugar con la intriga y a cuenta gotas nos ofrece pequeños detalles para motivarnos a seguir adelante, la cual se sazona con misiones secundarias que buscan explicarnos más sobre el trasfondo de este mundo distópico cibepunk.
Con un estilo de juego sencillo con capas de distinta jugabilidad que lo enriquecen
Estamos ante un juego de aventura de ciencia ficción en desplazamiento 2.5D, con un toque RPG y una capa de ligera de exploración metroidvania. Teniendo libertar de ir de aquí a allá en su mundo abierto, además de contar con sencillos árboles de habilidades para mejorar nuestra protagonista, misiones secundarias que implican investigar y un poco de pirateo informático haciendo coincidir unos círculos, así como compra de ítems y equipamiento.
He encontrado agradable afrontar las misiones secundarias que siguen la misma línea de investigación y no nos mandan al sitio opuesto de nuestra misión principal, así que en ningún momento la desviación nos distrae del objetivo primordial, además de tener un humor cómico sin intención.
Pasando al estilo de combate, ANNO: Mutationem es realmente divertido como sencillo. Pasaremos de la exploración 2.5D a la acción plataformera con un profundo y fácil de aprender sistema de combate con vistosos combos y contraataques.
Tenemos ataques ligeros y pesados, así como de largo alcance para poder variar nuestro repertorio de ataque, así como el siempre fiel doble salto. Nuestro armamento se puede mejorar con chips que incrementan sus efectos elementales, daño crítico, o podremos construir otros con los restos de tecnología obsoleta que nos encontremos.
Al comienzo estaremos en un machaca-botones y con el progreso nuestra estrategia pasará a ser más cauto con las técnicas y el uso de ataques ligeros con pesados, lo cual se siente muy satisfactorio.
Por fortuna hay mini-juegos como servir bebidas en el bar Jarra Siciliana con una combinación de botones y mezclando para satisfacer a los sedientos clientes, estas actividades refrescan nuestro interés en las actividades secundarias sin desconectarnos de la campaña principal.
La mayor parte del tiempo Ann es fluida en sus movimientos y muy responsiva, pero, al momento de pelear se pierde un poco esta fluidez al sentirse ligeramente pesada en sus movimientos y un cierto retraso al atacar.
Hay una pequeña capa de coleccionables que nos incentivan a curiosear cada rincón, los cuales nos permiten desbloquear nuevos atuendos o coches con lo que podremos navegar las distintas locaciones.
Al día de hoy, el título ha sido actualizado con una Nueva Partida Plus y nuevas dificultades que nos permiten rejugar el título para redescubrir aquellos secretos que se nos hayan pasado.
Su estilo de arte enamora a primera vista
El juego corre a una resolución de 1080p a 30 fps en una PlayStation 4 Slim. El título encanta con su estilo de arte pixelado que nos rememora el 2D de alta definición visto en juegos como Octopath Traveler y el reciente Triangle Strategy.
Cuenta con pantallas de carga bastante pronunciadas de hasta 30 segundos, las cuales suceden cuando cambiamos de locación, así como pequeños hipos gráficos en momentos puntuales, lo cual no arruina la experiencia, pero sí es muy notable. De igual manera no me agradó que al cambiar el atuendo de Ann que hayamos equipado, en las cinemáticas no los porta y usa la apariencia base.
Hay una hipnotizante combinación de colores neón con ese estilo retro de 32-bit que derrocha encanto. Anno: Mutationem está lleno de vida en cada rincón que navegamos con PNJs interesantes, a la vuelta de cada esquina podemos encontrarnos con artistas holográficos, productos alienígenas y personajes sombríos provenientes de muchos rincones de la galaxia.
Debo decir que esta ambientación futurista me ha flipado, notando claras referencias e inspiraciones sacadas de Blade Runner, Ghost in the Shell e incluso El Quinto Elemento. Ann en su aventura es ayudada por una buena variedad de personajes desde la adorable Ayane que nos acompaña todo el tiempo en forma de asistente holograma, hasta el enigmático profesor Alan Doyle que nos apoya con varios artilugios.
El juego nos ofrece un “modo foto” que lo único que hace es congelar la imagen y limpiar la interfaz, sin efectos o movimientos de cámara. Algo que siento muy desaprovechado.
Cuenta con melodías con un encantador toque futurista
En lo musical es excepcional, con melodías pegajosas que tienen ese sabor futurista y tonos con sintetizador que da gusto escuchar. En cuanto a las actuaciones de voz, tenemos la original en chino, así como opciones en inglés y japonés. Las tres opciones están muy bien conseguidas, aunque constantemente me debatí entre el inglés y japonés, ya que ambos tienen un agradable nivel de actuación. Esto a pesar de ser pocos los diálogos hablados.
En cuanto a los textos y subtítulos, tenemos opción de elegir el castellano, con notables errores de traducción y en distinción de género que a pesar de sus múltiples actualizaciones no han sido arreglados, asimismo, el tamaño de los subtítulos es decente, mas, me gustaría poder incrementarlo, en razón que a momentos cuesta leerlos y que suele salirse del cuadro de texto.
Conclusión
Anno: Mutationem es un juego de acción aventura ciberpunk 2.5D que sabe encantar con sus mecánicas plataformeras y capa RPG. Su historia es intrigante y satisfactoria con ese toque de ciencia ficción que mola, la cual nos puede tomar alrededor de 10 horas completar.
Su estilo de juego es sencillo con una ventana a la profundidad. La exploración recompensa la curiosidad, con un mapa que podemos consultar rápidamente si nos perdemos en las áreas. Visualmente es una delicia con su arte pixelado de 32-bit y su banda sonora que sabe transmitir esa sensación futurista.
A pesar de sus pequeños fallos, su rendimiento es bueno, y cuenta con textos en castellano que les hace falta una revisión, así como la posibilidad de incrementar su tamaño.
8,5
*De acuerdo con nuestra política, informamos a nuestros lectores que este título ha sido jugado gracias al envío de una copia de prensa por parte de Lightning Games. Se jugó la versión 5.00