Astral Chain – Análisis Nintendo Switch

astral chain analisis switch

  Astral Chain

Platinum Games lo ha vuelto a hacer. Tras traernos Nier: Automata llega, esta vez para Nintendo Switch de manera exclusiva, Astral Chain. Una entrega completamente nueva y que poco o nada tiene que ver con lo que nos habían ofrecido hasta la fecha. Combates frenéticos al más puro estilo hack ‘n’ slash para un jugador. Empuña tu arma y prepara tu legión que nos lanzamos de lleno a la batalla.

Una historia algo usada

[dropcap]A[/dropcap]stral Chain transcurre en un futuro donde la Tierra se ha visto invadida por quimeras. Estas quimeras proceden del plano astral y, gracias a la materia roja, están infectando el mundo humano y apoderándose de él.

Las únicas personas capaces de hacer frente a esta amenaza son los miembros de Neuron, una policía de élite equipada con legiones. Las legiones no son más que quimeras domesticadas que responden a las órdenes de su dueño, pero es importante no olvidar su naturaleza salvaje.

Pues en esta vorágine de acción nos movemos y es que, el último refugio de los humanos, el Arca, está en peligro. Para proteger el arca, nos pondremos en la piel de los gemelos protagonistas eligiendo entre él o ella. Una vez elegimos el personaje, empezamos de lleno con el quid del juego.

Somos policías y tenemos que investigar un nuevo caso: las quimeras han vuelto a atacar. En un principio, nosotros no sabemos qué son las quimeras ni qué apariencia tienen pues eso solo corresponde a Neuron. Nosotros investigaremos la escena y sacaremos nuestras propias conclusiones para más tarde, hacérselas llegar a nuestro superior que, para sorpresa nuestra, es nuestro padre.

Como no podía ser de otra forma, los acontecimientos acaban propiciando nuestro ascenso y convirtiéndonos no solo en miembros de Neuron sino en los únicos capaces de recuperar el control.

Resulta habitual ver en este tipo de historias personajes variados y cambios de guion “inesperados” por lo que realmente acaba siendo de lo más predecible.

Si obviamos eso y teniendo en cuenta que se trata de un hack ‘n’ slash (que generalmente deja un poco de lado la historia para centrarse en el combate) enseña una historia correcta sin demasiada trascendencia, pero con suficiente consistencia como para mantener el interés.

Un combate espectacular

Lo mejor que tiene el juego, sin duda alguna, es el combate. A pesar de ser un hack ‘n’ slash no es un machacabotones más. De hecho, si nos empeñamos en hacer eso, seguramente acabes muerto y sin saber qué es lo que estás haciendo.

Nuestro personaje cuenta con un arma, el Bastón X; con un aparato de “investigación” el IRIS y con una legión. El bastón X se puede ir mejorando según avancemos en la historia y subamos de rango según los puntos obtenidos en cada misión. El IRIS por su parte, es un añadido que nos facilita la identificación del entorno dándonos puntos de interés, zonas en las que podemos llevar a cabo alguna acción, etc. Pero lo interesante de todo esto es la legión.

La legión no solo puede mejorarse según ganamos experiencia, sino que obtendremos varias legiones a lo largo del juego (con un total de 5) que deberemos comprender y saber manejar pues en más de una ocasión tendremos que usar varias encadenando sus ataques y habilidades. Cada una de las legiones tiene habilidades propias y por tanto un árbol de desarrollo diferente y bastante complejo.

Combate

La unión de estos tres elementos (bastón, IRIS y legión) será lo que haga del combate una locura difícil de entender, aunque fácil de superar. En todo momento debemos tener en cuenta no solo los puntos débiles de cada adversario sino los nuestros propios y jugar con la legión que tenemos en el campo llevando el ataque al siguiente nivel.

En este apartado lo más flojo es la escasa variedad de enemigos pues nos presentan una larga lista de ellos, pero la diferencia entre unos y otros tanto a nivel estético como en combate es mínima.

Banda sonora magnífica

Si bien lo más interesante que ofrece el juego es el combate y la jugabilidad, la banda sonora no se queda atrás y viene de la mano de Satoshi Igarashi (compositor para Nier: Autómata entre otras). Cada zona y combate tendrán su propia melodía que no dejará a nadie indiferente pasando de ritmos tranquilos y melódicos a algo completamente contrario en segundos.

Siempre es importante saber hacer bien este apartado, pues puede suponer la completa inmersión del jugador y por tanto un mayor disfrute del juego. En este punto, no tiene fallos. Es brillante de principio a fin dando lugar a algunas de las canciones más impresionantes que he oído en un juego en los últimos años. Aquí os dejo el tráiler de presentación de Nintendo por si no lo habíais visto para que podáis disfrutar de esta banda sonora.

En un entorno repetitivo

Está bien que la banda sonora cambie según el escenario, pero si éste se repite una y otra vez a lo largo del juego, al final podemos acabar cansados de oír constantemente lo mismo por muy bueno que sea y es que el juego tiene un puñado (pequeño) de localizaciones donde desarrolla toda la trama.

El escenario principal es la sede Neuron por lo que no deja de ser una oficina con distintas habitaciones y plantas. Si salimos al mundo real, tenemos la plaza central donde se desarrollan la mayoría de las misiones o bien algún que otro escenario algo diferente. Si pasamos al plano astral, todo son formas rectangulares rojas y negras en constante cambio sobre un fondo rojizo nuboso.

Es sin duda el punto más flojo del juego, la verdad, hace que pierda gran parte del interés que pueda tener el jugador por seguir avanzando. Algo así, en un juego tan completo como este me parece un gran fallo por parte del equipo y que espero mejoren si se atreven con una segunda entrega. Intentan añadirle algo de miga haciendo que haya zonas u acciones que solo podremos realizar en una segunda visita o incluso en una segunda vuelta, pero sigue quedando bastante flojo este aspecto.

Duración correcta con un final aceptable

El juego se divide en operaciones que a su vez se dividen en misiones rojas y azules. En total podemos contar con 11+1 operaciones, me explico, en la 11 el juego finaliza, pero la misión «extra» será las delicias de cualquier jugador avanzado pues ofrece una serie de retos de lo más variopintos que deberemos superar con unos parámetros prefijados.

En cuanto al resto de capítulos, como digo, están subdivididos en misiones rojas y azules. Las misiones rojas serían las secundarias mientras que las azules es el avance en la misión principal. Lo curioso de este juego es que no es necesario hacer todas (ni rojas ni azules) para avanzar en la historia. A pesar de eso, recomiendo intentar hacer el máximo, no solo para obtener una mejor puntuación y por tanto más experiencia sino para ir cogiéndole el truco al juego y así poder disfrutarlo aún más.

Mejora tras cada combate

Al final de cada misión nos dirán la puntuación obtenida por rango (al igual que en Devil May Cry o Bayonetta, desde la D hasta la SSS) en función del tiempo, los combos realizados o el daño recibido. Al completar la operación completa, se calculará la puntuación de ésta por la media de todas las obtenidas en misiones azules.

Con todo esto, podemos completar el juego en unas 20 horas aproximadamente si somos un poco hábiles y vamos realizando todo o casi todo (lo cual recomiendo encarecidamente).

Y finalmente, habremos llegado al final. Un final algo insulso en cuanto a historia pero que encaja perfectamente por las posibilidades de combate que ofrece.

Posibilidad de rejugarlo una y otra vez

Si con las 20 horas de historia que tiene el juego no hemos tenido suficiente, no temáis pues ofrece una rejugabilidad fantástica. Como ya he comentado, hay zonas a las que accederemos en un primer momento y que, por la falta de quimeras, no podremos explorar. Es en esta segunda vuelta cuando podremos sacarle todo el jugo a esas zonas. Podremos interactuar con nuevos elementos o descubrir secretos escondidos. Además, como habremos mejorado a nivel personal y en el juego, podremos volver a completar las misiones para intentar conseguir una mejor puntuación u otros objetos con los que seguir mejorando a la legión o nuestro tan preciado bastón x.

Trabaja con tu legión

Potencia gráfica, con límites

En esta ocasión, el juego se ve espectacular. Incluso con la cantidad de acciones que hay en pantalla sigue viéndose bien y sin atascarse siempre que hablemos del modo portátil de la consola.

Si decidimos jugar en la televisión, veremos reducida de manera significativa la calidad de imagen e incluso nos encontramos con algún momento de congelación de la pantalla (pocos y cortos). Por lo demás, el juego sigue funcionando igual de bien que en su modo portátil

No obstante, debemos tener en cuenta que es un juego con estética anime. Abstenerse todos aquellos que quieran ver el reflejo de la luna en los ojos del protagonista. Se centra en lo que debe: los personajes y el entorno se ven bien, sin fallos, sin dientes de sierra y sin bajada de fps.

Una potencia ajustada al juego que tenemos entre manos. Detalles mimados en un conjunto equilibrado.

Conclusión

Platinum Games ha vuelto a coronarse y esta vez lo hace en la híbrida de Nintendo, ofreciendo al jugador la posibilidad de llevarse un verdadero hack ‘n’ slash allá donde quiera. Las innumerables opciones de combate que ofrece son algo fresco y que se echaba de menos en el género aportando gran calidad y convirtiéndose un título digno de estar entre el top 10.

Como opinión solo me queda recomendarlo a cualquiera que tenga una Switch ya que es un MUST sin lugar a dudas. Merece la pena comprobar de primera mano todo lo que ofrece y disfrutar de las «japonesadas» que encontraremos en el título y de las que he preferido no hablar para dejar algo al descubrimiento.

Nota: 9/10