Call of Duty: Black Ops 4 – Análisis PlayStation 4

Finalmente ha llegado al mercado la nueva entrega de la saga Call of Duty, que llega de manera renovada y fresca de la mano de Treyarch. Con unos grandes cambios como es prescindir de la campaña y la incorporación al mercado de los Battle Royal, Black Ops 4 se centra de manera exclusiva en sus vertientes multijugador.

[dropcap]U[/dropcap]na de las cosas que me gustaría comentar antes de empezar a hablar un poco sobre cada uno de los 3 modos de juego, es la campaña, la cual no hay. En las últimas entregas las campañas fueron cada vez más hacia abajo, si bien en World War II es bastante aceptable, en anteriores títulos dejaban que desear, siendo incluso omitidas por muchos de los jugadores. Quizá este dato, junto a la evolución del mercado más enfocado a títulos en línea, es el motivo por el cual se ha prescindido de la experiencia de un jugador, sin embargo ¿es esto algo malo? ¿ha afectado al juego? Creo que no. Antes de tener una campaña que no aportará nada, ni al juego ni al jugador, es preferible que se inviertan esos recursos en las otras áreas de desarrollo, y amigos, os aseguro que se nota que lo han hecho.

Multijugador. Sencillo, competitivo y directo

Tal y como ya veíamos durante sus fases beta, el juego apuntaba alto y claro hacia un multijugador más agresivo y competitivo. Cuando escribí las impresiones no iba mal encaminado, desde luego. Ahora que he podido jugar lo suficiente al multijugador puedo confirmar que sigue manteniendo sus raíces y se adapta cada vez más a un público que busca el entretenimiento y la competición a partes iguales.

Actualmente el juego cuenta con 14 mapas, muchos de ellos nuevos y otros traídos de anteriores entregas por lo que algunos los reconoceréis nada más entrar en la partida. Los modos de juego están distribuidos mediante 3 posibilidades: destacado, principal y extremo.

En destacado encontraremos diferentes listas de partidas distribuidas un poco según lo que más juguemos, por ejemplo, está DPE Caos que incluye baja confirmada y duelo por equipos o Foso de captura, que incluye modos de objetivos como dominio o punto caliente. En principal encontramos el conjunto de modos de juego: control, atraco, contra todos, baja confirmada, dominio, punto caliente y duelo por equipos. Y en extremo, obviamente, los modos de juego con modificadores de “realismo” para los más experimentados o que buscan una experiencia de juego diferente.

Lo más destacable del modo multijugador son los modos control y atraco. En control los equipos se turnan para atacar/defender dos objetivos, hay vidas limitadas y los especialistas juegan un papel fundamental, por lo que hay que aprovechar bien las habilidades. Y atraco, que es un modo de juego que se asemeja más a Counter-Strike en el que los equipos deben coger un saco con dinero y extraerlo. La diferencia de este modo respecto a los demás, es que las vidas están limitadas a uno por jugador, se pueden revivir a los aliados durante un periodo de tiempo y no hay creación de clases, los jugadores deben invertir el dinero ganado en las rondas para comprar equipo, munición e incluso las ventajas.

Respecto a la jugabilidad, se vuelve al movimiento clásico de los primeros Black Ops sin saltos dobles, ni correr por paredes ni nada por el estilo. Las armas se distribuyen en fusiles de asalto, subfusiles, ametralladoras ligeras, fusiles tácticos y francotirador, cada una de ellas con su conjunto de accesorios y, misteriosamente, algo más balanceado que en anteriores entregas, aunque sigue habiendo armas que destacan ligeramente por encima de otras.

En toques generales, el multijugador sigue siendo uno de los principales atractivos de Call of Duty, cada vez más refinado y mejorándose entrega tras entrega. Especialmente en esta entrega, donde hay un frenetismo increíble en todas las partidas, se hace que echar unas cuantas horas sea de lo más ameno. Hasta el momento, la reducción a lo clásico y sencillo, pero sin renunciar a mecánicas nuevas, hace que esta entrega se sitúe entre las más decentes. La parte mala del multijugador es que aquellos con conexiones algo malas, que no lentas, van a verse ligeramente perjudicados al haber más elementos a tener en cuenta como la caída de bala y que el rival tiene más salud.

Una experiencia zombie completa de base

Uno de los pilares fundamentales desde que se inició en World At War es el modo zombies, que ha ido evolucionando desde un simple modo donde resistíamos oleadas de zombies hasta el punto actual, donde es un universo completo con su propia historia, más que loca y a su vez, interesante contada mediante una serie de huevos de pascua y cinemáticas.

Y por supuesto, en esta entrega no iba a ser menos. De salida contamos 3 mapas (4 si compras el pase): Travesía infernal, IX, La sangre de los condenados y Confidencial. IX y travesía infernal son nuevos añadidos, mientras que el mapa la sangre de los condenados nos vuelve a llevar a alcatraz (BO2) y Confidencial nos devuelve a Five (BO1).

Una de las cosas que más me ha gustado, es que nada mas entrar en zombies tenemos la opción de jugar un tutorial que nos pone al día, tanto a nuevos jugadores como a veteranos, sobre los cambios hechos en Black Ops 4, que si hace unas cuantas entregas que dejaste de jugar, notarás que es mucho cambio, sobre todo si eres un jugador que juega estos modos solo por echarse una tarde de diversión.

Las principales novedades que encontramos están a nivel de configuración de clase, donde ahora se pueden escoger armas especiales, una serie de elixires (con usos ilimitados muchos de ellos) y las bebidas de las cuales dispondrán las máquinas, siendo un total de 4 y desbloqueándolas subiendo de nivel. Luego una vez dentro del juego, tenemos las mesas de elaboración, en las que fabricaremos diversos artilugios para ayudarnos tanto a eliminar zombies como a avanzar en la historia de cada mapa, para ello tenemos que reunir previamente las piezas escondidas por el mapa. Junto a estos cambios, se une que el equipo, elixires y arma especial tienen tiempo de enfriamiento, por lo que si esperamos suficiente siempre tenemos granadas o nos podemos salvar gracias al uso del arma especial o incluso un elixir.

Estos elixires, por cierto, se consiguen en el menú laboratorio invirtiendo los recursos que ganamos por jugar, única y exclusivamente. Están divididos por rarezas y aquellos más allá de los básicos tienen usos limitados, por lo que hay que seguir creándolos aleatoriamente en el laboratorio.

Un gran añadido también es sin duda los diferentes modos de juego. Se ha incluido el modo estampida que similar a un modo arcade donde nos centraremos en despejar oleadas de zombies y conseguir la mayor puntuación posible, adquiriendo de manera gratuita las mejoras y armas del nivel. También hay diferentes modos de dificultad, aunque en las listas públicas se juega en normal por defecto. Para aquellos que, además, quieran jugar con sus propias reglas pueden crear partidas personalizadas con múltiples posibilidades e invitar a sus amigos.

Una última cosa a comentar, es que el diseño de los niveles de este modo cada vez va a mejor, no me deja de sorprender para bien hasta donde puede llegar el modo zombies de Call of Duty. Una entrega tras otra, mejoran un poco, refinan la formula y van dando más en el clavo, por no hablar de la autentica locura que supone hallar el huevo de pascua que da fin a la partida, con su jefe final y su cinemática. Desde luego, otro gran retorno para este modo y aun a falta de ver contenido futuro.

Blackout, la nueva apuesta dentro del universo Call of Duty

En un mercado donde Fortnite y Pubg han generado tantísimo dinero y a día de hoy se han convertido en auténticos reyes a la hora de adquirir jugadores, toca renovar y ponerse al día con lo que los jugadores quieren. Los battle royal van pegando fuerte, y Blackout no iba a ser menos.

En este modo de juego, los jugadores se enfrentarán entre sí en solitario o en grupo, para ver quien es el ultimo en sobrevivir. La formula base del modo de juego, sigue siendo la misma que usan todos, pero con el añadido del multijugador de Call of Duty. Estamos ante el primer battle royal en primera persona que se hace con una base de jugadores y bien merecida.

Durante los días que se pudo probar no sé que tenía que no me terminaba de sentir cómodo, como que algo no me encajaba. Sin embargo, después de echar unas cuantas horas, tengo que decir que ha sucedido todo lo contrario.

Lo primero de todo es que el mapa del juego pese a ser más pequeño que sus competidores, está bien aprovechado. Muchas de las localizaciones son pequeñas partes de mapas conocidos de la franquicia e incluso algunas ocultan pequeños secretos. Entre todas estas localizaciones, hay bosque o desierto, lugares donde más tenso esta uno porque pueden venirte de cualquier sitio. Aunque lo que mejor hace, es que todo sucede rápido, si quieres ir de un sitio a otro no hay problema, puedes usar vehículos terrestres, aéreos e incluso acuáticos. La zona segura cada vez se cierra más rápido, sobre todo de camino a las últimas rondas, forzando a los jugadores a enfrentarse si quieren ser los ganadores.

En lo jugable me he llevado una grata sorpresa. Es un modo de juego, que, bajo mi punto de vista, no te fuerza a tener una habilidad excesiva para llegar a ser ganador o al menos, quedar entre los primeros, a diferencia por ejemplo de Fortnite, donde los niveles de habilidad de jugador si se marca un abismo de diferencia entre alguien bueno y alguien no tan bueno. Por lo general, si sabes jugar al multijugador, se te dará bien.

Las zonas en las que puedes caer tienen bastantes cosas, por lo que encontrar un arma no será difícil. Lo que más me llama es que puedes ir acoplando y desacoplando accesorios, puedes encontrar ventajas, hay 3 tipos diferentes de blindaje, multitud de equipamiento (granadas, minas láser o incluso el gancho) e incluso la pistola laser de zombies aunque lo mejor, es que la interfaz de acceso rápido a todo este equipamiento es muy amigable de cara al usuario, aunque quizá aún le falte un par de cosas que mejorar respecto a interfaz. Ofrece bastantes opciones de afrontar diferentes situaciones tanto en campo abierto como en terreno edificado.

Lo cierto es que la primera persona le sienta como anillo al dedo esta formula de battle royal con los toques que hacen único al multijugador. Estas partidas rápidas, con tensión prácticamente todo el tiempo, el poder desplazarse de manera fluida y que haya tanta posibilidad de enfrentar las diferentes situaciones, hace que sea algo totalmente divertido incluso para gente como yo, que realmente no somos fans de este estilo de juego, pero ya incluso acumulo mi primera victoria en solitario.

Adiós a las microtransacciones… ¿De momento?

Tras venir de World War II se me ha hecho raro no encontrarme con cajas de botín o algún tipo de microtransacción más allá del pase de temporada. De momento, de hecho, han incorporado gratuitamente una especie de “pase de batalla” que desbloqueará diferentes cosméticos y gestos con tan solo jugar, y otro más como evento de Halloween. Sin embargo ¿es esto algo temporal? Se ha visto que existen los puntos COD dentro del juego, los cuales se usaban en anteriores entregas para comprar diversos objetos. No pretendo hacer crítica de esto más allá de mera curiosidad por saber como evolucionará en un futuro, que modelo de negocio optarán para mantenerse al pie del cañón. Pero sí que os reconozco que por ejemplo en WW2 uno de los incentivos que tenía para entrar a jugar cada día era completar mis contratos diarios y adquirir mis cajas de botín de manera gratuita. Habrá que esperar para ver como evoluciona todo este asunto, ya que es algo que actualmente interesa bastante a los jugadores.

Conclusiones

Lamento haberme extendido demasiado, pero creo que era necesario. La saga Call of Duty ha vuelto a ponerse en forma, parece que entrega tras entrega se está recuperando de un legado perdido donde prácticamente dominaba el multijugador en consolas. Las 3 diferentes experiencias multijugador cumplen de manera excelente llegando a prácticamente cualquier tipo de público sin que se note la ausencia de una campaña que ha llevado años en la saga. Centrarse precisamente en Call of Duty como un título multijugador, seguramente a largo plazo, ha sido uno de los grandes cambios.

La nueva apuesta por incluirse en el mercado de los battle royal, pese a haber sonado algo loco durante tiempo, parece más estudiada y trabajada de lo que muchos creíamos, haciéndose un hueco en un mercado que parecía imposible de entrar con los actuales competidores.

Ahora solo nos falta ver la evolución del título a lo largo de este año, que cambios harán, que nuevo contenido ofrecerá, que habrá que pagar y que no… Pero en general y sin miedo a equivocarme, puedo decir que, con lo actual, ya merece bastante la pena.