Call of Duty: Black Ops Cold War
Llega la nueva entrega de la franquicia más vendida de Activision, y que, recientemente, también es de las más jugadas gracias a Warzone, el popular battle royale F2P que le dio mucha vida a Modern Warfare. Call of Duty: Black Ops Cold War ha llegado 1 año después para continuar lo que se hizo con Modern Warfare, que fue volver un poco más a las raíces y dejarse de tanto futurismo, para dejarnos en principios de la guerra fría y la tensión entre la URSS y los Estados unidos en una campaña, que si bien corta, interesante. También incluye el clásico modo multijugador, y con el tan querido regreso de los zombies, uno de los modos más queridos siempre dentro de la saga, tanto por su diversión como por las horas que brinda buscando cada secreto. Pero bueno, no nos vamos a liar demasiado con esta introducción y vamos directos al análisis de Call of Duty: Black Ops Cold War.
Una campaña típica de Black Ops
Primero vamos a hablar del modo campaña del juego, un modo que muchas veces se juega y ahí se queda, seamos honestos. Pero omitir la campaña como ya hizo Black Ops 4, creo que devalúa mucho el valor de la saga, especialmente cuando se pueden seguir haciendo campañas buenas como hemos visto con el anterior Modern Warfare.
La campaña de Cold War nos trae viejos amigos como Hudson, Woods o Mason, pero no será a quienes controlaremos, la mayor parte del tiempo jugaremos con un completo desconocido. Esta vez jugaremos con «Bell», un personaje que podemos «personalizar» al inicio indiciando un poco su pasado, personalidad y que habilidades tiene como soldado. Las habilidades a escoger son básicamente cosas como recarga más rápida, menos estremecimiento, más velocidad de apuntado y similares, como si fuesen un poco las ventajas del multijugador, pero seleccionando 2.
Respecto a la historia, dicho de una manera rápida, es de lo más común que podemos encontrar en un juego bélico de Activision. Estados Unidos, los «buenos», quiere pararle los pies a Perseus, el «malo», ya que tiene preparado un ataque a gran escala que amenaza con destruir el «mundo libre» que ha concebido los Estados Unidos. Para ello la CIA prepara a un grupo de soldados (Adler, Woods, Mason y Hudson) listos para buscar a Perseus y acabar con él, o al menos, impedir que lleve a cabo su plan. De primeras, insisto, suena a una historia de lo más común y sencilla, pero esto es un Black Ops, y nada es lo que parece, por supuesto, contamos con esos giros de guion de película palomitera que son suficiente para mantener nuestra atención.
Con novedades, pero no suficientes
Si hablamos de novedades hay que mencionar claramente el sistema de decisiones, que permite tomar decisiones tan importantes como acabar con alguien o retenerlo para interrogarlo, cambiando ligeramente la situación del momento. Solo hay una decisión al final que es importante de verdad, ya que en base a esta podremos ver uno de los 3 finales disponibles en el juego. También hay momentos de misiones secundarias que evitan un poco que el juego resulte tan pasillero, pero sin duda lo mejor es la variedad.
Acostumbrados como siempre a las campañas de «ir y disparar», Cold War aporta un poco más de variedad en este sentido. Sí, es cierto que gran parte consta en moverse y disparar, con un gunplay incluso estándar en el género (la única novedad, realmente, es tomar enemigos como escudos), pero hay unas cuantas misiones que meten ese puntito extra. Por poner ejemplos, algunas de las fases requerirán de buen sigilo, otras como la infiltración en el KGB tiene diferentes opciones de realizarse, o incluso una de las misiones del final, que permite diferentes caminos y opciones para completarse, pero con mucho interés.
También se han añadido dos misiones secundarias con requisitos de acceso. Durante el juego iremos recogiendo una serie de pruebas que sirven para resolver los acertijos que nos proponen ambas, y aunque haya que pensar un poco y esto pueda resultar curioso tienen un problema. Y es que por mucho interés que propone el juego en hacerlas, una vez dentro, son misiones demasiado simples y sin mucho que aportar, una de ellas de hecho es: ir, matar a un tipo, extracción. Es una pena, porque este apartado podría haber sido una genialidad…
Bueno, ya solo queda daros un pequeño resumen de la campaña. Si algo me queda claro, es que no es una campaña que vayamos a recordar especialmente, está bien dentro de lo que cabe, tiene buenos momentos épicos, divertidos y muy entretenidos, pero que son muy pocos para hacer disfrutar al jugador de manera continuada. Las novedades son más bien pocas y con una duración escasa de alrededor de 6h con poca rejugabilidad. Al final te quedas con que te la has terminado, has pasado bien esas 6 horas, y te queda darle muchas horas al multijugador y los zombies. Podemos decir que es una campaña en la línea general de la franquicia, buena e interesante, pero sin llegar a destacar como fueron las campañas de Black Ops 1 y 2.
Técnicamente sigue siendo espectacular
Si algo ha mejorado en la franquicia, es su apartado técnico, mejorando poco a poco con los años. En Black Ops Cold War esto sigue igual, la campaña la hemos disfrutado a 60 FPS cosa que a veces parecía todo un sueño, aunque con alguna bajadilla nada preocupante. Modelados, animaciones, texturas, sonidos… Esto sigue siendo excelente, exceptuando que algunas texturas han preferido cargarse a ritmo de tortuga en alguna ocasión. También unos tiempos de carga algo largos, ojalá tener una PlayStation 5…
La única pega es en la banda sonora, que quitando un par de momentos donde acompaña perfectamente, otros no pegan mucho. Además, que estamos en los 80s, podrían haber puesto muy buenas canciones de la época. Una queja es que la canción de las intros de las misiones, es siempre la misma, o excesivamente similar, lo que no ayuda.
Un multijugador en el que trabajar
Desde que estuve probando la beta del multijugador, tenía mis dudas sobre cómo acabaría resultando este modo, especialmente tras la viciada que tenía a Modern Warfare y su multijugador. Especialmente, siendo jugador del multijugador, más que de Warzone, soy más partidas rápidas y entretenidas. Durante la beta ya me encontré con ciertos problemas, que eran principalmente la falta de algún ajuste para el mando o, claramente, las armas que se mostraban superiores respecto a otras.
Y la verdad es que no hablo de los mapas, que habiendo unos cuantos siempre acaban saliendo los mismos en las rotaciones, o los modos de juego, que aunque haya alguno nuevo, no sorprende por culpa de la existencia de Warzone o lo ya visto en guerra terrestre de Modern Warfare. Ni siquiera voy a entrar mucho aquí, porque nos encontramos con lo que se puede esperar en este sentido.
Solo un pequeño comentario respecto a los mapas, los cuales me los esperaba algo más abiertos o con más verticalidad, pero la verdad que se ha vuelto más a lo clásico de 3 calles. En mi caso no lo veo como algo malo, ya que me gustan más este estilo. Hay alguno que si es algo más abierto, pero generalmente son pequeños y destinados a partidas rápidas, que personalmente es lo que más busco debido a mis tiempos. Especialmente al momento de escribir este análisis, que Nuketown está de vuelta.
Quiero decir, no es que se innove demasiado ni se hayan roto la cabeza a la hora de hacer el multijugador, han cogido una fórmula que ya funcionaba y la han aplicado a esta nueva entrega. Está también clarísimo que la gallina de los huevos de oro es Warzone, no el multijugador. Además, también habrá que esperar a que llegue la primera temporada con la gran actualización, tanto de contenido, como de balance.
El balance no es el que gustaría
Ahora si entramos en problemas más serios del multijugador, que por muy divertido y entretenido que pueda ser, siempre hay problemas, el principal directamente es el balance de las armas. Osea, hay 4 armas clave que, si no las usas, vas a tener muchos problemas. Armas tan sencillas como la MP5 o la AK-74u, destacan muchísimo sobre otras con ciertos accesorios. Vale que también depende de la habilidad de uno como jugador, pero os aseguro que la diferencia es bastante grande entre usarlas y no.
Y es que este problema suele estar en todos los CoD de inicio, pero ya va siendo hora de que se tomen un poco más en serio esto de salida, porque para muchos puede llegar a ser frustrante o recibir una primera mala impresión del juego. También se han cambiado algunas animaciones, como el deslizamiento que ahora es algo más realista, pero otras como agacharse/tumbarse han sido modificadas de manera que molestan al hacer técnicas como el dropshot. Por no hablar de que diría tranquilamente que ahora los personajes llegan a superficies mucho más elevadas…
No todo es conformismo
Dentro de que el multijugador, podemos decir que está algo verde, y necesita más trabajo, no es que sea de lo peor. Es jugable y disfrutable, pero seguramente será mejor en cuanto llegue el primer parche decente. Sin embargo, hay un aspecto que sí me ha parecido todo un acierto, y son los ajustes de mando, algo que se comenta poco… A mi me gusta tener las cosas a mi gusto, suelo personalizar bastante las sensibilidades y demás, y desde que Apex Legends me permitió ajustar de manera más extensa, allí jugaba mejor.
En esta entrega podemos modificar también las zonas muertas de nuestros joysticks, que en mi caso me gustan bien bajitas. Es la principal novedad, sí, pero es que me parece una opción que a día de hoy debería estar en todos los juegos, al igual que poder ajustar la curva de respuesta como ocurre en Apex. Otra buena opción nueva es el cambio en el campo de visión, pudiendo ser este ahora hasta 120, y yo que acostumbro a jugar a 110, me parece genial. ¡Y el rinde juego igual de bien!
Los zombies llegaron, se quedaron y son el mejor punto
Desde la aparición de los zombies en Call of Duty: World at War, ha sido uno de los modos más queridos de la comunidad, y es que lo cierto es que suele destacar incluso por encima del multijugador. La tendencia de hecho ha sido ir mejorando este modo, metiendo una gran cantidad de historia detrás bestial, junto a maneras muy enrevesadas de descubrir todo lo que hay. Obviamente, con Cold War no iba a ser menos.
Ahora mismo contamos con el Die Maschine, bastante completo, amplio y con una historia bastante interesante a la que tenemos que prestar mucha atención. Pues solo los que consigan hacer todo al completo irán conociendo la historia que se esconde detrás de este misterioso bunker. Algo que me ha gustado bastante es el cómo está planteado el modo zombies esta vez, con una variedad de armas bastante interesante, mejoras de campo, armas específicas de este modo e incluso sistema de crafteo in-game y la posibilidad de conseguir una extracción y no aguantar a los zombies. Especialmente útil si queremos maximizar las recompensas y no arriesgarnos demasiado.
Estamos ante un modo muy entretenido de jugar, tanto solo como con amigos. La posibilidad de ir mejorando continuamente mientras jugamos, para volver más fuertes al próximo intento es todo un lujo, así como las posibilidades de mejora dentro del propio mapa. ¿Mejorar armas? Hecho. ¿Tipos de munición elemental? Hecho. ¿Mejoras clásicas? Hecho. Y eso sin contar las rarezas de las armas, que podemos evolucionarlas en plena partida, o los blindajes al más puro estilo Warzone.
También cuenta con un modo de juego por oleadas donde hay que sobrevivir siguiendo un orbe de éter, cargarlo eliminando zombies y enfrentarnos cada cierto tiempo a un «Elite». Podéis sacar alguna buena recompensar, pero ciertamente no es tan entretenido como el mapa de Die Maschine. Ah, y que no se me olvide, vuelve también el cásico «Dead Ops Arcade» para aquellos más fanáticos del «twin-stick» shooter.
En resumen, contamos con un buen modo de zombies de vuelta, que, al igual que pasa con el multijugador, ira evolucionando a lo largo de su vida con nuevos contenidos que mejorarán todavía más la experiencia.
Conclusiones de Call of Duty: Black Ops Cold War
No voy a engañar a nadie, quizá no es el regreso perfecto, pero está en la línea de lo que nos acostumbra a traer la franquicia. Con Modern Warfare hemos vivido una de las mejores experiencias de los últimos años en la franquicia, con un juego que ha ido mejorando MUCHÍSIMO, y que espero que sea algo que se repita durante el tiempo de vida de Cold War. No hay más que tener en cuenta que dentro de poco Cold War llegará a Warzone, «dejando atrás» la historia de MW.
En Cold War disfrutamos de una campaña corta pero que se disfruta, un multijugador al que todavía le queda algo de trabajo y un modo zombies que regresa espectacular, prometiendo a simple vista mucho con futuras actualizaciones. Creo que me he explayado bastante en el análisis, así que no hay mucho más que decir, excepto que habrá que ver cómo evoluciona el juego durante los próximos meses para ver tendremos ese mimo que se tuvo con la anterior entrega.
Nota: 8/10
*De acuerdo con nuestra política, informamos a nuestros lectores que este título ha sido analizado gracias al envío de una copia de prensa por parte de Activision.