Empire of Sin – Chicago bajo tu mandato
El equipo de Romero Games nos trae una atractiva apuesta para aquellos que, más que nada, desean ser los «malos» de la historia. Empire of Sin es un simulador que, básicamente, trata de ser los mejores mafiosos de todo chicago en pleno 1920, durante la época de la ley seca. Sin embargo, como todo buen juego de estrategia, no vamos a ser los únicos en querer hacernos con el negocio del alcohol ilegal, así que tendremos que pensar bien qué es lo que queremos hacer, cómo y dónde actuar, y escoger nuestros amigos y enemigos. A lo largo de este análisis iremos viendo los diferentes puntos del juego y desgranaremos los diferentes sistemas de los que hace gala el juego.
Escoge tu capo para dominar Chicago
Antes de comenzar cada una de nuestras partidas vamos a tener que escoger a uno de los contrabandistas más buscados de la época, entre los que se encuentran algunos como Al Capone, Elvira Duarte o Frank Ragen. En total son 15 los personajes entre los que podemos escoger, y es que no es simplemente algo visual, pues cada uno cuenta con una serie de misiones distinta, y diferentes bonificaciones y penalizaciones, digamos que algunos no son muy diplomáticos.Es muy importante tener en cuenta a quién hemos escogido, porque en base a sus habilidades, nos interesará más tirar por una estrategia u otra. Por ejemplo, si controlamos a alguien que tiene menos gasto de mantenimiento en bares, será de donde más provecho sacaremos al final, o si tiene más producción de alcohol, pues igual. Hay que fijarse bien en lo que hace cada uno antes de comenzar a hacer el loco, e incluso fijarse diplomáticamente que es lo que más le favorece.
Por último, antes de comenzar a hacernos con los diferentes barrios de chicago, es el momento de ajustar la partida a nuestro gusto. Podemos seleccionar la cantidad de barrios, facciones y la dificultad del juego antes de comenzar. La dificultad, hasta el momento, veo que se centra más en el dinero que recibes al inicio de cada partida, siendo más fácil simplemente comenzar.
Lo primero, nuestra banda
Antes de comenzar a dar una vuelta por el distrito, ver a nuestros nuevos vecinos, y darnos cuenta de que todos ellos son gentuza que quiere nuestros locales, es importante preparar nuestro grupo. En Empire of Sin tendremos diferentes apartados de gestión, y realizaremos muchas cosas a la vez, siendo una de ellas principalmente desplazarnos con nuestra banda a los diferentes locales, ya sea para saquear, conquistar, comprar o simplemente buscar alguna recompensa.
Para ello tenemos 2 vistas del mapa, una vista aérea con los puntos más importantes resaltados, o más de cerca con todo lujo de detalles. Pero esto no es a lo que vamos ahora, sino a cómo se contratan nuevos miembros y se gestiona el personal.
Tendremos una ventana fantástica donde podemos ver todos los personajes disponibles en ese momento para contratar y que se unan a nuestra banda. Para contratar a muchos de ellos primero necesitaremos tener ciertos puntos de mala fama, que se consiguen eliminando enemigos principalmente, y con algunas acciones más. A más puntos, más cosas podremos conseguir, es algo así como nuestra «experiencia»
A la hora de contratar a cualquier persona para que pelee a nuestro lado tendremos que tener en cuenta sus relaciones personales, pues si se llevan mal entre ellos a largo plazo pueden suceder cosas malas, o que simplemente se vayan. Por lo demás, será importante revisar que armas y habilidades tienen, pues no es lo mismo contratar a un asesino a sueldo, que un personaje más defensivo, otros se centran más a distancia o en el uso de explosivos y demás armas no convencionales. Una buena composición es casi clave para ganar algunas de las peleas más duras.
Cada personaje, además, se le puede acabar asignando puestos en nuestra banda para que sirven de líderes a los demás, de manera que acaban siendo muy importantes. Respecto a las habilidades, se tardan días en aprender, siendo más tiempo a más nivel de la habilidad. También podemos equipar diferentes armas como pistolas, rifles, subfusiles, escopetas, fusiles de precisión, armas cuerpo a cuerpo, granadas, accesorios… Está bastante completo en este sentido. Por lo demás simplemente avisaros que es mejor cuidarse de quién tienes a tu lado, y que la seguridad es muy importante en tiempos de guerra.
El gánster empresario
Sabiendo un poco lo que podemos hacer con nuestros personajes, es el momento de gestionar todos nuestros edificios (ya aviso que es más bien microgestión) y ser el capo con más dinero, alcohol e influencia de Chicago. Para hacernos con los edificios podemos: comprarlos, limpiarlos de maleantes o conquistar los del rival. Si hacemos esto último, y hacemos el mismo tipo de negocio, nos saldrá totalmente sin coste pero ganaremos enemigos seguro. Hay un total de 5 edificios diferentes:
- Hotel
- Bar
- Casino
- Burdel
- Destilería
- Piso franco (fase avanzada del juego)
Cada uno de estos edificios cuenta con una bonificación y una penalización, por ejemplo los burdeles no requieren de alcohol, pero pueden hacer que los miembros de tu banda pillen una ETS. Otro buen ejemplo son los bares, que siendo un buen edificio de beneficios, también puede generar alcoholismo. Siempre hay algo a favor, y algo en contra, exceptuando el Hotel, que es simplemente para mejorar la prosperidad del barrio.
Para sacar ventaja a todo esto, hay sinergias de edificios que aplican bonificaciones. Es decir, ganas un pequeño plus por tener, por ejemplo, 1 edificio de cada tipo. Al final lo mejor es tener un poco variado, siempre con un hotel en cada barrio. Aunque depende de la situación también puede convenir un edificio u otro, esto ya dependerá de la estrategia de cada uno.
Todos los edificios disponen de diferentes mejoras con las que ganaremos más dinero, habrá más clientela, será más de lujo, tendrá más seguridad o incluso pasará más desapercibido ante las redadas. Hay que tener en cuenta que queremos maximizar el beneficio, pero tampoco queremos quedarnos sin local, por lo que hay que pensar en que orden mejorar los edificios. Sin embargo, la parte de gestión más interesante, está en que hay que «programar» que tipo de alcohol hacemos en las destilerías y cual mandar a consumir en tu barrio.
La gestión de todo esto es bastante sencilla, de hecho, diría más bien que esto es microgestión, pues lo más importante realmente está detrás del personal y las diferentes facciones que se encuentran en el barrio. Es donde digamos, está lo que más da la vuelta a la partida.
Plata o plomo, la ley de chicago
En Empire of Sin hay diferentes maneras de hacer las cosas, por la vía diplomática o por las malas. En el juego contamos con un apartado de diplomacia donde podemos ver el estado de todas las facciones y hacer tratos con ellos, los cuales se verán influenciados por nuestras decisiones mientras jugamos. Tener edificios en el mismo barrio, por ejemplo, ya es motivo para que nos vean como una amenaza, así como no presentarse cuando se conoce una nueva facción, amenazarla, o el mero hecho de cómo tratas a los aliados y enemigos de las facciones. En este sentido hay que estar siempre atento, pues hay momentos del juego que merece la pena estarse quieto y no hacer «nada».
Dentro del apartado de diplomacia, podemos ver claramente que facciones colaboran y cuales están en guerra, algo que podemos aprovechar para hacernos aliados de alguna facción. Algo que siempre tendremos que estar pendientes, por ejemplo, es de tener acuerdos comerciales o de comerciar, ya que podemos sacar muy buenos beneficios de ello. Por otra parte, podemos pedir favores, protección, así como ofrecerla nosotros mismos, o pactos de no agresión, aunque si somos un don nadie nos va a costar muchísimo.
De hecho, en base a mi experiencia de juego, este punto es muy importante, ya que podemos pasar desapercibidos negociando con otras facciones y sacando un buen dinero, sin necesidad de ser una amenaza para las demás, y cuando avanza el juego, solicitar ayuda para guerras. O incluso que nos la pidan y exijamos un buen botín a cambio sin decir nada.
Por supuesto, otra opción que nos da el juego es buscarnos la vida y dedicarnos a pegarle tiros a todo lo que no nos guste. Aunque el juego en este sentido es más «realista», pues las mafias tienen códigos que suelen seguir, y eso se ve aquí muy bien reflejado. A fin de cuentas, el negocio está por encima de todo.
Está bastante bien trabajado, sin necesidad de ser algo que nos complique la vida como ocurre con juegos más grandes como un Stellaris, con prestarle atención de vez en cuando, observar el mapa, y saber tomas decisiones correctas, tendréis más que suficiente.
Los combates necesitan ser algo más interesante
Aunque el apartado de gestión está bastante decente, sin ser algo exageradamente profundo, donde el juego pierde la mayor parte de gracia es en los combates. No es que sean malos, ni estén mal hechos, es simplemente que rompen un poco el ritmo y son algo aburridos.
Se trata de los típicos combates por turnos en los que los personajes tienen puntos de acción. Seleccionas moverte, atacar o realizar alguna habilidad, gastas tu PA y listo. De hecho los combates iniciales son bastante simplones y se hacen en menos de 5 minutos si aprovechas bien la habilidad de tu personaje. Cuenta con sus sistemas de cobertura, porcentajes para acertar los disparos, y cosas que bueno, ya hemos visto en otros juegos como XCOM o Age of Wonders, sin nada realmente sorprendente o innovador. El problema que tengo con estos combates, es que en una partida avanzada, se acaban volviendo lentos, y muchas veces, ni siquiera por tu culpa, solo porque hay unidades de otras facciones de por medio.
Creo que igual un botón de acelerar los combates estaría genial, porque hace poco hemos tenido un combate de, sin exagerar 15 minutos, en el que no pintábamos nada, eran 2 facciones pegándose con la policía, pero si huyes, te cuenta como derrota. Así que de vez en cuando, rompe el ritmo, tú te quieres ir y seguir con lo tuyo, pero te ves atrapado. Y bueno, como digo, no es que tengan un buen ritmo y eso acaba rompiendo un poco el resto de las gestiones del título.
Una experiencia que es buena, pero necesita trabajo
El juego lo hemos ido jugando antes del lanzamiento, con ciertos fallos que bueno, al principio la experiencia no era toda la que se podría desear, con bastantes fallos. A día de hoy hemos recibido unos cuantos parches, más los que están por venir, pero os digo que ahora mismo el juego se puede jugar sin muchos problemas.
Los principales problemas que existen a día de hoy en el juego están más relacionados con cosas de interfaz, donde a veces fallan y salen cosas donde no hay, algunas habilidades que se pueden quedar bug si luego atacas a melee, y cositas que afectan menos al progreso. En general, se ha ido mejorando a bien, pero todavía le quedan pulir cosas, especialmente a nivel de interfaz, que es dónde más problema le veo. Así que si leéis otros análisis antiguos donde se quejan más, sabed que ahora mismo está algo más arreglado. Por mencionar algo más que no me ha convencido, ha sido la banda sonora, la cual he acabado desactivando porque se hace repetitiva tras un buen rato jugando. Y en último lugar, la traducción del título, siendo esta bastante confusa al estar incompleta en ocasiones, o simplemente, mal traducido.
Por lo demás encontramos un título bastante convincente, con un buen rendimiento en la versión de PC y, que a falta de mejorar, promete bastante y puede llegar a engancharte.
Conclusiones de Empire of Sin
Empire of Sin es un buen título de estrategia y gestión en el que tendremos que poner empeño para aprender sus mecánicas, especialmente cómo funciona la diplomacia del juego para que no vengan a por nosotros rápidamente. Funciona bastante bien como título estrategia basado en gestión, pero no tanto en su parte de acción, siendo esta algo mejorable. Actualmente el juego cuenta con algunos fallos que se están mejorando rápidamente para mejorar la experiencia, y eso pues siempre está bien, puesto que están haciéndolo bastante deprisa. Personalmente, es un título que me ha ido enganchando, y tengo varias partidas con diferentes capos, por lo que confirmo que el enganche puede ser real, así que por tanto puedo recomendar el juego sin miedo.
Nota: 7/10
*De acuerdo con nuestra política, informamos a nuestros lectores que este título ha sido analizado gracias al envío de una copia de prensa por parte de Koch Media.