Tengo una especial pasión por los plataformeros y como persona nacida en los 90’s me ha tocado vivir una gloriosa época en la que nos llegaban animes bastante alocados que prácticamente desconocíamos sus orígenes, cosa que con la globalización actual ya no sucede porque en minutos sabemos hasta el DNI de los desarrolladores.
Con motivo de su lanzamiento en formato físico para Europa de parte de Tesura Games nos llega KinnikuNeko Super Muscle Cat, juego que fue desarrollado por el español Kamotachi y editado por Mameshiba Games. Lo mejor es que llega en edición Edición Estándar y Edición Purrrrfect) para PlayStation 5.Una alocada historia con gato lleno de esteroides
El juego nos presenta un mundo que ha sido conquistado por alienígenas y ha secuestrado a seres humanos para experimentos. Lemon, una inocente chica con ese aire kawaii nipón se ve acorralada por los invasores extraterrestres, frente a ella un singular gatito se presenta para ayudarla, pero Lemon al notar su débil apariencia le pone una extraña tanga azul que lo transforma en un imponente fisiculturista humanoide.
A Lemon se le une Keita, el clásico amigo miedoso cuyo único impulso para acompañarlos es su fuerte amistad y sea de paso rescatar a sus padres que se encuentran cautivos. KinnikuNeko tiene en sus hombros la tarea de enfrentar a los invadores liderados por la General Pitaya y sus dos fieles, pero torpes esbirros.
Sin entrar en mayores detalles, el juego brilla por estar plagado de un humor bastante tontorrón con un toque nipón a un nivel de meme, habiendo parodias a animes clásicos y hasta referencias a series más actuales como One Punch Man, Dragon Ball y One Piece, una verdadera locura. Realmente me ha entretenido la manera en que progresa con ligera seriedad, sin olvidarse del no tan “inesperado” giro de trama para conseguir darnos una sonrisa con su conclusión.
Sencilla jugabilidad con una equilibrada curva de dificultad
Estamos ante un juego plataformero 2D, KinnikuNeko Super Muscle Cat no cuenta con niveles de dificultad, nuestro minino protagonista puede alternar en dos formas jugables: la del gatete normal que no puede defenderse, pero sí salta y trepar por las paredes, mientras que su segunda forma es la de calzoncillos con músculos que le permite repartir estopa entre los alienígenas, romper obstáculos y un poco más.
KinnikuNeko puede potenciar su fuerza en los gimnasios ocultos en los niveles, aquí tendremos que machacar el botón cuadrado (DualSense) en los minijuegos de levantamiento de pesas. Una limitante de las dos formas de nuestro gatete es que depende de Lemon para intercambiar, y es que algunos niveles exigen el uso de una de las dos formas, lo que vuelve molesto tener que volver en nuestros pasos para pedirle a Lemon la transformación.
Habría sido ideal tener completa libertad en la transformación para explorar a nuestras anchas los niveles, los cuales tienen una buena estructura con pequeñas desviaciones que nos llevan a encontrar sus pequeños coleccionables y fases que ofrecen un pequeño cambio de género con minijuegos musicales a lo Guitar Hero o de disparos, y mi favorito un duelo de pulsos a base de palabras.
El juego es corto, el recorrido nos puede tomar alrededor de unas dos o tres horas, la recolección de estrellas y sus coleccionables incentivan la rejugabilidad para desbloquear su galería de arte. Mientras que las batallas contra jefes, algunas son bastante inspiradas, mientras que otras se sienten algo simplonas en donde solamente es necesario movernos sin recibir daño.
Gráficamente tienen una influencia noventera muy bien conseguida
Algo que me ha molado mucho es su colorido estilo de arte que resalta mucho cada detalle de los escenarios y los personajes, en algunas escenas unos alienígenas nos robaran la atención al ver cómo uno intenta confesar su amor a una extraterrestre, siendo una sub-historia que incluso al final de la aventura tiene su emocionante cierre.
Los escenarios tienen una riqueza visual muy variada que me ha dado reminiscencias a Doraemon, además de contar con bellos fondos que complementan la ambientación. Entre los alienígenas tenemos diseños tan locos como un pony que lanza pedos de arcoíris. Es verdaderamente flipante ver que todo ha sido hecho por una sola persona.
El juego corre a 60 fotogramas por segundo a una resolución de 2160p en la PlayStation 5. No he notado fallos afecten mi aventura, mas, un pequeño error que hizo que KinnikuNeko se quedara atascado a un lado de la pantalla durante una batalla de jefe. Una pequeña pega que he detectado son sus pequeñas pantallas de carga de entre 2 y 4 segundos.
Su banda sonora tiene un encanto único
En lo musical cómo mola mogollón, principalmente su tema de entrada con un tono muy pegajoso digno de un anime de época. Los niveles tienen esa extravagancia sonora para mantenernos animados explorando.
En las voces cuenta con opciones en inglés, japonés y en castellano, un agasajo total escuchar sus actuaciones de voz en castellano que tienen mucho mimo en cada interacción de los personajes y logran dar su mejor interpretación a pesar de ser una aventura llena de humor irreverente.
En cuanto a la accesibilidad, por obvias razones de su producción independiente se encuentras muy limitado ofreciendo solamente opciones para textos con alto contraste, los subtítulos tienen un tamaño aceptable para la lectura, mas, esto pasa a segundo término gracias a sus portentosas actuaciones de voz en castellano.
*De acuerdo con nuestra política, informamos a nuestros lectores que este título ha sido jugado gracias al envío de una copia de prensa por parte de Tesura Games. Se jugó actualizados a la versión 2.000.001 en PlayStation 5.
