Quienes ya nos deleitaron con juegos especialmente diseñados para esos días de fiesta en grupos más o menos grandes nos sorprenden con Little Secret un juego de roles ocultos y adivinación de palabras. ¿Conseguiréis dar con el intruso?
El objetivo del juego es muy sencillo: descubrir quién es quién con ayuda de una palabra.
En total hay tres tipos de roles siendo los discípulos (la mayoría) que tienen una palabra en común a descubrir, los infiltrados que tienen una similar y el periodista quien no tiene ninguna palabra.
¿Sencillo, no? La cosa es que nadie sabe si es discípulo o infiltrado por lo que puede estar convencido al 100% de ser discípulo y descubrir que no (no diré que me pasó, pero me pasó jaja).
Obviamente el único que sabe quién es será el periodista ya que su carta no cuenta con ninguna palabra.
Lo básico:
Little Secret es un juego que trae poco contenido físico, pero que da para muchas horas ya que solo trae 1 manual, 170 cartas de misión y 9 cartas de poder. Solo con eso ya tenemos juego para rato.
Es un juego recomendado para mayores de 10 años, que permite jugarse en grupos de 4 a 10 jugadores y cuyas partidas apenas durarán 15-20 minutos.
Si bien es cierto que se puede jugar en grupos reducidos, en esta ocasión, es mucho más divertido cuantos más jugadores seáis ya que no solo se complica el decir palabras sin repetir, sino que salen creaciones mucho más variadas.
¿Cómo se juega?
Sencillísimo. Para preparar la partida elegimos unas cuantas misiones, el juego cuenta con 17 para que no nos aburramos. Cada una de una ciudad del mundo diferente.
Una vez que elegimos las misiones, seleccionamos tantas cartas como jugadores seamos, teniendo en cuenta el reparto de roles que se indica en función de los que juguemos. Una vez que hemos preparado las cartas de la misión que vayamos a jugar en ese momento, repartimos una a cada jugador, que la podrá ver, pero no enseñar.
A la par, dejamos sobre la mesa boca abajo la carta de Palabras Secretas de la misión que vayamos a jugar. Esta carta contiene las palabras que los discípulos encontrarán en su carta, por lo que es importante que nadie la consulte hasta que llegue el momento de hacerlo.
La partida se desarrolla en rondas. Para comenzar la ronda, un jugador elige una palabra de su tarjeta y dirá al resto de jugadores el número que tiene asignado dicha palabra. Empezando por quien ha elegido palabra, cada jugador en orden, debe decir una palabra relacionada con la que tiene en la tarjeta. Recordemos que la mayoría tendrán la misma, pero otros tendrán una similar.
Es posible que en ese recorrido diciendo palabras relacionadas, se diga incluso la de la tarjeta, dejando claro quién no está en el equipo (también me pasó jaja). Además, el periodista debe estar súper al loro ya que, al no tener palabra, tendrá que intentar adivinar cuál es y decir una relacionada sin levantar sospechas.
Es importante tener en cuenta que las palabras no pueden repetirse y que cuanto más abstractas sean, más difícil se lo pondremos a los demás (a todos).
Cuando todo el mundo ha dicho su palabra empieza lo bueno. Llega el momento de debatir, acusar, señalar con el dedo e incluso, según el grupo, amenazar e increpar. Se debe votar para elegir al periodista o a algún infiltrado y echarlo del grupo para preservar la normalidad del rebaño. Una vez que se ha debatido, se vota. La persona con más votos comprueba mirando la tarjeta de Palabras Secretas que colocamos en el centro si su carta coincide. Si no coincide, enhorabuena, habéis eliminado a un infiltrado. En ningún momento debe decir cual es su palabra, ni la persona eliminada ni los demás, con una excepción. Si descubrimos al periodista, este puede intentar adivinar qué palabra tienen los discípulos y si la acierta, habrá ganado.
La siguiente ronda comenzará con la persona de la izquierda de quien empezó la anterior y se continuarán diciendo palabras hasta conseguir acabar con todos los infiltrados.
¡Una vez que acabemos con esa misión, es momento de volar a otro sitio y hacer otra!
Además, para darle más chicha al asunto, encontramos unas cartas de poder que tienen una habilidad concreta que le darán vidilla al juego. Estas cartas se reparten aleatoriamente y se colocan boca arriba delante de cada jugador para que todos conozcamos la habilidad que tienen.
Experiencia de juego:
He podido jugar a Little Secret y es desternillante. Aunque me ha gustado más en grupos más grandes, es igualmente disfrutable en grupos de reducido tamaño (4 jugadores). Lo mejor de estos juegos es jugarlo con amigos o gente que conozcas ya que saldrán verdaderas joyas para intentar adivinar las palabras.
Al ser un juego que necesita poca explicación y preparación, se puede jugar en todo tipo de ambientes, especialmente en esas noches de fiesta y zumos de más. Es un juego que me recordaba en gran medida a Código Secreto por el tema de la relación de palabras añadiendo el toque del impostor.
**De acuerdo con nuestra política, informamos a nuestros lectores que este título ha sido jugado gracias al envío de una copia de prensa por parte de ATM Gaming.
