Nioh 2 – Análisis PS4

Nioh 2

Nioh 2 y el folclore de Japón

Hace 3 años aproximadamente que el Team Ninja, desarrolladores de juegos como Ninja Gaiden, nos sorprendieron con Nioh 1 en exclusiva para PlayStation 4 (más tarde en PC). El título recogía parte de la formula usada en la saga Souls, pero la adaptaron por completo en Nioh, haciendo que comparar ambos títulos sea prácticamente inútil. En lo único que se parecen, es en que ambos son títulos desafiantes. Además de esto, Nioh 2 utiliza el folclore japonés y la propia historia del país para crear su universo, que mezcla realidad y ficción.

Si bien Nioh podríamos denominarlo de nicho, los que terminamos la primera entrega descubrimos un juego con un increíble potencial, que se expandió de muy buena manera con sus DLCs y del que todos esperábamos una continuación. Ahora con Nioh 2 en las manos, tras jugar sus diferentes betas, os contamos que es lo que nos espera y nos ha parecido.

Los eventos previos a Sekigahara

Si bien Nioh es de estos juegos dónde venimos principalmente por la jugabilidad, hay que recordar que tiene una historia detrás, y en el caso de Nioh 2 es algo más «profunda». Mientras que los eventos de Nioh 1 ocurrían en torno a los años de la batalla de Sekigahara (1600), los eventos de Nioh 2 son anteriores, acabando casi a la par que los eventos de Nioh 1.

Esta vez se prescinde de un personaje principal fijo como era William en el 1, y se nos permite crear nuestro personaje, de lo cual hablaremos más adelante. Los eventos de Nioh 2 cubren el ascenso de Oda Nobunaga, así como su muerte y unos cuantos años posteriores, aunque también abarcan el arco final de Nioh 1 como comentabaEso en lo que es la parte realista, y con ciertas diferencias, por supuesto.

En el apartado de la ficción, todo comienza una vez más con los Yokais y las piedras espirituales. Nuestro personaje es un híbrido entre Yokai y humano, lo que se llama un cambiante, capaz de fundirse en uno solo con un espíritu guardián. Sin embargo, tiene una misión muy especial, recuperar la legendaria espada matayokais y terminar con un legendario mal que se avecina a la región

Si bien no es necesario haber jugado Nioh 1 para entender la historia, sí que reconozco que si lo acabaste con los DLCs, la historia en general está mucho más interesante. Pese a ser un título donde no es su punto principal, yo al menos he disfrutado de esta parte como persona a la que siempre le ha llamado la atención estos periodos de la historia de Japón.

Creando nuestro personaje

Como decía, esta vez tenemos que crear nuestro personaje, y por ello tenemos un increíble editor de personajes que nos permite hacer muchísimos ajustes. Prácticamente cada parte que se puede editar tiene sub-partes a modificar. Sin ir más lejos, dentro del pelo podemos cambiar el flequillo, los laterales, o la parte trasera.

También podemos dar forma a la cara y cada una de sus partes con una amplia selección de parámetros, por lo que en general, a quienes le guste esto, ya van a pasar un buen tiempo aquí por adelantado antes de comenzar.

La jugabilidad se mantiene, pero mejorada

En la primera entrega ya pudimos disfrutar de la asombrosa jugabilidad de Nioh, y esto es algo que se mantiene en su segunda entrega. En esencia es la misma jugabilidad, pero hay una serie de cambios que hacen que el título se pueda disfrutar de una manera más completa en este aspecto.

Se mantienen las armas que ya conocíamos, pero a estas se han añadido la guja alternada y las hachuelas, junto a los elementos de corrupción y pureza. También ha habido cambios en el sistema de habilidades, que ahora es más intuitivo, y en cómo se ganan los puntos de magia omnyo y de ninjutsu. Ahora tan solo tendremos que usar objetos de magia o ninjutsu para ir ganando puntos en esta rama, permitiendo que, sin distribuir estadísticas, podamos explorar estas 2 ramas en conjunto a las armas. Eso sí, si queremos que sean más potentes habrá que distribuir puntos de estadísticas.

Un extra además de esos cambios, es que podemos resetear nuestros arboles de habilidades de manera independiente en el dojo en cualquier momento por un pequeño coste monetario, evitando así tener que hacer otro personaje o resetear por completo a nuestro personaje.

Respecto a las armas tengo que confesar que me he encontrado muy bien con todas, incluso se nota que han trabajado bastante para balancearlas todas. Ahora todas las armas son realmente útiles, solo se ven diferenciadas por alguna situación en concreto u enemigo. Personalmente el juego me lo he terminado usando las hachuelas y me ha sorprendido a más no poder, pues la postura alta de estas es extremadamente potente. Aprovecho para recordar que se mantienen las posturas baja, media y alta, tal y como ya sucedía en su primera entrega.

En resumen, dentro de lo que es la base del juego en armas, habilidades de estas y desarrollo del personaje, es muy similar a la primera entrega. Las principales diferencias son que hay 2 categorías nuevas de armas, y un sistema de habilidades mucho más intuitivo y trabajado.

Yokais como parte de la jugabilidad

Ahora bien, dentro de que es la capa más densa de la jugabilidad, sí que ha habido cambios importantes en Nioh 2. Los más importantes los vamos a encontrar de cara a los espíritus guardianes, el arma viva que ha sido cambiada por la transformación Yokai y los núcleos de Yokai.

En esta nueva entrega han querido darle más importancia al mundo ficticio de los Yokai, incluso dando a entender en más de un momento, que ambos mundos podrían convivir. Por ello, esta vez también podemos ganar poder gracias a estas criaturas.

Dentro de los espíritus guardianes encontramos 3 clases diferentes, cada uno con su transformación y más importante, cada uno con un contraataque diferente. Ahora los Yokais y algunos humanos hacen unos ataques especiales, con un indicador en rojo que nos indica que se puede contraatacar, y esto se puede hacer de 3 maneras:

  • Forma Feral: el contrataque se basa en un esquive que deja una estela, si el ataque enemigo toca esta estela contraatacaremos.
  • Forma Bruta: daremos un golpe al enemigo para contraatacar.
  • Forma Fantasma: nos protegerá un escudo que, sí activamos en el momento justo, ejecutaremos un contraataque.

Así mismo, cada una de estas formas es diferente una vez nos transformamos. Personalmente, vi mucho más interesante (y útil) el arma viva como transformación, ya que estas transformaciones solo me han servido puntualmente para salvarme de una muerte.

Además de esto, podemos equipar a los espíritus guardianes con almas de yokais, obteniendo así las habilidades de estos y ciertas bonificaciones, permitiéndonos hacerlas a cambio de ánima. De hecho, estas habilidades cobran una importancia muy superior en el combate.

El Reino Yokai y el Reino Oscuro

Todos conocemos de Nioh 1 las pequeñas áreas de reino yokai que dejaban estos enemigos, en las cuales perdíamos ciertas capacidades, mientras que ellos las ganaban. Esta vez cobra todavía más importancia, pero por la existencia del Reino oscuro.

Durante nuestras misiones veremos ciertas áreas cubiertas con una niebla que nos llevarán a este reino, en el cual nuestras capacidades humanas se verán mermadas, pero no las Yokai. Para purificar estás áreas hay que eliminar al enemigo que la genera. Aviso que suelen ser zonas difíciles, pero hay ciertas mejoras que evitarán que lo sean. Sin embargo, la peor parte de esto, viene con los jefes.

Mientras que en Nioh 1 el Ki de los jefes finales estaba un poco como algo secundario, aquí es lo más importante. Ahora los jefes tienen la barra de Ki debajo de la de salud, pero en grande en pantalla, bien visible y recalcándola. Además de quitarles Ki podemos reducir su capacidad máxima, y cuando esta llega a 0 podemos ejecutar un golpe de presa e infligir mucho daño. Así mismo, si están sin Ki podemos pararles los ataques.

La gracia de todo esto está en que ahora muchos jefes pueden llevarnos al Reino Oscuro, y bien les bajamos el Ki o aguantamos el tiempo suficiente para que vuelva a la situación normal. Aquí es donde cobran importancia las habilidades Yokai, ya que mermarán en Ki y la capacidad máxima de una manera mucho más efectiva que nuestras armas.

Duración y dificultad

Vamos a hablar de algo importante en el título, y es su duración, la cual es muy variable. Como de costumbre, el juego se divide en diferentes áreas con misiones principales y secundarias. A mí el título me ha durado cerca de 30h lo que es la historia principal con gran parte de las misiones secundarias, y cerca de unas 40h terminar lo que tenía pendiente en cuanto a completar misiones.

Sin embargo, aquí entran muchos factores. El juego puede variar según lo que investiguemos el mapa, lo que nos cueste, si nos dedicamos a recoger todos los kodamas de primeras, si ya tenemos la habilidad de Nioh 1, etc. En este sentido, cada jugador encontrará algo diferente.

Lo que sí es que en cuanto a su dificultad la he notado muy por debajo de las fases beta, y ligeramente más balanceado que Nioh 1. Aquí se sigue castigando mucho si el jugador no tiene habilidad y el fallar un solo ataque, pero en general no es tan complicado, y menos aún si venimos de Nioh 1. Siempre podemos optar por builds de defensa pura y aguante para enfrentarnos a todo los que nos echen, o bien recurrir al multijugador

Si no puedes solo, busca compañía

No hay de que preocuparse si no consigues hacer una misión tu solo, ya que el juego pone a nuestra disposición diferentes modalidades de juego online. La ya conocida es el uso de la Puerta Torii, que nos permite unirnos a jugadores mediante expediciones y los encuentros rápidos. Si vas a jugar con un amigo, las expediciones son lo vuestro, ya que podéis ir de seguido a las diferentes misiones sin cerrar el grupo. Los encuentros rápidos son para acceder a mundos aleatorios a ayudar sin más.

Si ves que necesitas solo un poquito de ayuda, también se han añadido las tumbas azules. Antes solo teníamos las rojas, que eran espíritus de otros jugadores muertos. Ahora los jugadores pueden dejar una tumba azul para que otros jugadores puedan invocarnos en forma de NPC, con un máximo de 3 tumbas de este tipo.

Hay que tener en cuenta factores como que solo el jugador al que ayudamos podrá causar grandes daños de Ki, nuestros daños se verán reducidos, además de haber más enemigos y ser más difíciles. Aunque el poder de varios jugadores, siempre será superior.

Rejugabilidad

Ahora bien, uno de los puntos importantes en Nioh es su rejugabilidad. Una vez acabamos la aventura desbloquearemos la siguiente senda (NG+), en la cual vuelve el equipo divino y comienza de verdad el título en cuanto a farmear objetos y usar la forja, donde cambiaremos bonificaciones y mejoraremos el equipo de muchas maneras diferentes. Desconozco cuantas sendas se han implementado de salida, ya que el NG+ actual lo llevo a un 60% aproximadamente.

Algo que he notado es que el salto al NG+ no es tan bruto como sucedía en Nioh 1 y cae algo más de botín con bonificaciones (+) para ir aumentando el nuestro. Y esto último se agradece, ya que puede llegar a ser muy tedioso conseguir algo, y también costoso.

Por otra parte, podemos pasar tiempo subiendo el resto de armas, conseguir títulos, recoger los kodamas y mechones de pelo, completar todas las secundarias, desbloquear las habilidades ocultas, etc. El juego da para muchas horas, aunque quizá no es para todo el mundo en este sentido.

Apartado técnico

Nioh 2 es ligeramente superior que su predecesor, se notan ciertas mejoras en los modelados y animaciones, aunque gran parte del juego se mantiene en lo que ya vimos. Se repiten muchos elementos de escenario e incluso enemigos (no les culpo, es la misma época y país), pero algo más novedoso aportaría algo de frescura. Se repiten incluso algún que otro escenario directamente, por lo que creo que este apartado podría haber estado algo mejor.

El juego rinde bien si activamos el modo de acción, mientras que con los otros 2 modos yo califico el título de casi injugable en comparación, hay mucha diferencia jugar este título a 60FPS bien con el modo acción, y hacerlo a 30 «fijos» o variables. En general funciona a 60 fotogramas por segundo, pero sí que he tenido algún parón momentáneo de unas milésimas de segundo.

La banda sonora es algo que también controla muy bien el título, ya que los temas, especialmente en los jefes, acompañan de manera espectacular. Y de igual manera que ocurre con la saga souls, estos temas tratan de transmitir un sentimiento relacionado a quien nos enfrentamos, y creo que lo consigue bastante bien.

Conclusiones

Nioh 2 me ha gustado bastante, ya le llevo más de 60h echadas al título (gracias al confinamiento), pese a tener bastantes similitudes con el primero. Pero precisamente creo que esto es lo que hace que me enganche. La fçormula de Nioh 1 funcionó bastante bien, a mí me encantó de sobremanera, y que se repita en Nioh 2, con algunos cambios, me parece el punto clave para que los fans de la saga vuelvan a la carga.

El universo de Nioh 2 con todo lo que le rodea es algo que siempre me gustó, junto a una jugabilidad fluida con largas horas por delante y tantas cosas por hacer, hacen de Nioh 2 una experiencia casi perfecta para los fans del género y la saga. Ideal además, para llenar ese pequeño vacío de títulos del estilo que tenemos ahora mismo.

Hay algunas cosas más breves que no comento por no tener gran importancia, pero hay mucho más que hacer y explorar de lo que parece a primera vista. Por último, hayas jugado al primero o no, es un título recomendadísimo, además que hay muchos menús de ayuda por si no sabes cómo funciona algo exactamente. ¡Mucha suerte a todos los que jueguen!

Nota: 9/10

De acuerdo con nuestra política, informamos a nuestros lectores que este título ha sido analizado gracias al envío de una copia de prensa por parte de Precision Spain.