Nintendo presentó la Nintendo Switch 2 la semana pasada en una Nintendo Direct que causó sensaciones divididas, unos por su nuevo catálogo de título y otros por su elevado precio.
Otras revelaciones incluyeron información sobre la interfaz de usuario, la nueva función GameChat y más. Sin embargo, una característica que los fans esperaban con ansias era la posible inclusión de un sistema de logros.
Sin manera de alardear los éxitos con los amigos
Cabe mencionar que Playstation o Xbox tienen su propio sistema de logros que al día se hoy se han convertido una curiosa combinación de emoción, obsesión y frustración entre los más apasionados.
Cuando Polygon le preguntó a Bill Trinen, vicepresidente de experiencia de jugador y producto de Nintendo, sobre si la nueva consola rompería con la tradición de Nintendo e introduciría recompensas para toda la consola por jugar, respondió con un rotundo: «No».
Si bien la consola no tendrá logros para toda la consola, dos juegos de la edición Nintendo Switch 2 tendrán sus propias listas de logros internos, aunque estarán disponibles en una aplicación móvil.
The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom y The Legend of Zelda: Breath of the Wild tendrán ediciones para Switch 2, así como una nueva aplicación, Zelda Notes, que formará parte de la aplicación de Nintendo.
Como parte de la aplicación Zelda Notes, Nintendo ha añadido listas de logros para ambos juegos.
Los logros registrarán aspectos como las armas recolectadas, el número de santuarios completados y otras métricas del juego. Otro sistema de logros, las medallas, se otorgará al alcanzar ciertos hitos del juego. Los jugadores pueden comparar sus logros con los de sus amigos y otros jugadores en la aplicación de Nintendo.
Para muchos jugones es una sorpresa decepcionante, pero esto no significa que estudios terceros no puedan replicar el sistema interno de logros como en la actualidad algunos juegos de Nintendo Switch 1 presentan en su interfaz integrada para motivarnos a completar los títulos al 100% y sacarles todo el provecho o frustrarnos en el intento.