Octopath Traveler II – Análisis

Han pasado cinco años desde el lanzamiento de Octopath Traveler, durante este tiempo el juego JRPG se ha mantenido con una buena popularidad al ser del tipo retro-moderno y estando disponible solamente de inicio en Nintendo Switch para luego llegar a PC y Xbox One.

Square Enix sin dilación se puso a trabajar en traernos una secuela que por fortuna llega en todas las plataformas de PlayStation, Nintendo Switch y PC. Octopath Traveler II ha sido concebido con la idea de traernos todo lo que amamos del juego original, incluso con sus pequeños fallos que a continuación detallo. Vamos al lío.

Su narrativa se divide en distintas historias llenas de magia e intriga

Octopath Traveler II comienza dándonos la oportunidad de elegir a nuestro protagonista inicial de los ocho disponibles, destacando que sin importar nuestro personaje inicial podremos aventurarnos en las demás historias sin perder el hilo.

Nuestros protagonistas son: Agnea; una bailarina que aspira a convertirse en una estrella mundial y traer sonrisas a todas las personas con su danza, Partitio; un comerciante que tiene como noble objetivo librar al mundo de la pobreza por medio de un comercio asequible, Castti; una boticaria que ha perdido sus recuerdos y en la búsqueda de su pasado enfrentará boticarios malvados, Ochette; Una cazadora semi-humana inocente que está en la búsqueda de derrotar monstruos malévolos.

Throné; una ladrona que está cansada de vivir bajo el circulo vicioso del derramamiento de sangre y buscarse su propio camino de vida. Osvald; es un erudito que ha sido acusado injustamente por un delito que no cometió, luego de escapar de prisión se embarca en un viaje de venganza. Hikari; es un gentil guerrero sin límites en la batalla que se encuentra en búsqueda de revancha contra su hermano que sumió su reino en el caos. Y Temenos; un clérigo que se encuentra investigando la iglesia por el asesinado de un sacerdote relacionado con una bestia mágica. Esta última es la mejor historia de todos los personajes por su toque de investigación e intriga.

Una vez superado el primer capítulo de historia se nos da total libertad para explorar el mundo y reclutar a los siete héroes restantes. Debo decir que las horas iniciales toma su tiempo en despegar, mas, una vez superada esta barrera todas y cada una de las historias se vuelven más emocionantes hasta su apoteósica conclusión.

Cada personaje y su arco respectivo son los suficientemente distintos uno del otro, incluso uno más interesantes que otros. Por desgracia Octopath Traveler II sigue lastrando el mismo problema de su juego original, consistente en que cada narrativa sucede por su lado sin un impacto real entre los personajes, las cinemáticas se inician como si cada personaje de nuestro grupo viajara en solitario y las interacciones entre nuestros personajes se limitan a breves momentos, así como mini-capítulos de caminos cruzados.

La tierra de Solistia está ambientado en un estilo de finales del siglo XIX con un mundo de personajes no jugables ricos en narrativa y que nos encontraremos en nuestra aventura, ya sea como misiones secundarias, haciéndonos parte de él sin que se sienta que el mundo gira entorno a nosotros.

Rumbo a su conclusión, el juego ata cabos de las historias individuales conectándolos haciendo que todo tome cierto sentido, haciendo que el viaje sea tan satisfactorio como emocionante.

En lo jugable mantiene sus cimientos versatiles e intuitivos

Octopath Traveler II es un JRPG que toma los elementos de la vieja escuela con la lucha por turnos, con la belleza de poder disfrutar cada aventura en cualquier orden sin verse afectada la narrativa de uno con otro.

Tenemos total libertad en explorar el mundo, el único límite son los niveles ya que los monstruos serán más fuertes en ciertas áreas y nos harán complicada la aventura. Los enfrentamientos son aleatorios, podremos correr, mas, al hacerlo se incrementa el riesgo de apariciones de monstruos.

Dado a lo basto de su mundo, hay mazmorras opcionales que nos conceden buenas recompensas y una buena profundidad en las habilidades. Lamentablemente, se sufre del síndrome de leveleo de los JRPG, en donde necesitamos lucha constantemente obteniendo niveles para afrontar los enemigos y acceder a los siguientes capítulos de la narrativa de nuestros protagonistas.

Hay tanto que hacer que puede ser abrumador si no nos tomamos con calma la aventura. Una nueva mecánica que me ha flipado son los ciclos de día y noche al alcance de un solo botón, que contribuyen en el cambio de los talentos adicionales de nuestros protagonistas.

Verbigracia: de día Agnea puede reclutar personas para invocarlas en combate, mientras que de noche puede obtener ítems por medio de sus ‘encantos’. Castti, de día puede obtener información que incluye ubicación de tesoros, mientras que de noche puede sedar y dejar fuera de combate a los PNJs.

En los combates los enemigos tienen una defensa que podemos ‘romper’ al atacarlos en sus debilidades elementales o con ciertas armas. Al lograrlo, podemos retrasar su turno causando mayor daño. En cada turno obtendremos puntos de impulso que nos permiten fortalecer los efectos de ataque y las habilidades.

También contamos con habilidades pasivas, así como una técnica definitiva con efectos devastadores en función al personaje en turno. Nuestro inventario es poco intuitivo, además que solamente podemos cambiar a los miembros de nuestro grupo en las tabernas de entre los cuatro que podemos tener activos, haciendo que el resto no obtengan experiencia, lo que nos obliga a estar variando el grupo dada a la restricción de niveles para continuar la narrativa.

Los combates se pueden acelerar hasta una segunda velocidad. Ahora, dado el nombre ‘viajero’ en el título del juego, la mayoría de los sitios los tendremos que visitar a pie o viajando en bote. Se tiene la función de viaje rápido en pueblos que hayamos visitado previamente.

Algo bastante frustrante son las misiones secundarias que el juego no nos ofrece ninguna pista o indicación en cómo completarla, obligándonos a explorar todo, hablar con todos hasta su realización.

Gráficamente es un deleite a la vista

Octopath Traveler II es sensacional con su arte pixelado de alta definición con su perspectiva 2D, cada sitio que visitemos está lleno de magia y color, con entornos muy bien cuidados y su iluminación es sensacional.

Los diseños de personajes siguen luciendo ese estilo miniatura lleno de encanto, los cuales no cambian de apariencia con el equipamiento, sino con la subclase que vayamos eligiendo para expandir el potencial de nuestros personajes.

El juego tiene un rendimiento espectacular en PlayStation 5 corriendo a 60 fotogramas por segundo, aunque en momentos puntuales hay leves retardos en la carga de texturas, así como ralentización en los FPS, nada bastante notorio o devastador que arruine la experiencia.

Su banda sonora es fantástica con ese toque clásico que se creía perdido

El juego cuenta con un apartado musical exquisito, con tonos que logran replicar el sentimiento de los míticos títulos de la era de 16-bits. Demostrando tener un nivel orquestal que en ningún momento nos cansaremos de escuchar, además de contar con una buena variedad en razón al escenario que estemos visitando.

En las actuaciones de voz cuenta opciones de doblaje en inglés y japonés, en donde mi recomendación es la nipona, ya que se siente mucho mejor currada con un encanto que la versión en inglés no logra igualar, mas, esto no significa que sea mala.

En cuanto a los textos, tenemos una inmejorable localización al castellano que adapta los acentos de los personajes en sus diálogos para darnos una mejor inmersión en su mágico mundo. Lamentablemente no podemos incrementar el tamaño de los textos, aunque tienen un tamaño bastante aceptable.