¿Te gusta conducir?
El pasado mes de Septiembre, Bandai Namco le daba el pistoletazo de salida a la segunda entrega de una de las franquicias de simulación automovilísticas mas grades de todos los tiempos. El lanzamiento de Project Cars supuso un paso más a lo que hasta el momento habíamos podido ver con otras franquicias del género, poniendo en jaque a grandes franquicias como Gran Turismo o Forza Motorsport, ambas exclusivas tanto de como de Microsoft respectivamente.
Con su segunda entrega, Project Cars 2, Slighty Mad Studios no ha querido quedarse corto, mejorando lo que ya vimos en el original y añadiendo un cúmulo de novedades que pintan bastante bien, todo esto apoyado por una excelente campaña de marketing guiada por Bandai Namco al igual que hizo en 2015 con el original. Pero vamos a dejarnos de rollos macabeos y pongámonos con el análisis en cuestión.
[dropcap]P[/dropcap]roject Cars 2, desarrollado por Slightly Mad Studios y publicado por Bandai Namco Entertainment, se presenta como una secuela que quiere dar un paso más a lo que ya vimos en su antecesor, haciendo llegar a todos los fans del género, un simulador de conducción con aires de grandeza y que pone en el punto de mira una vez más a los eSports, aspecto en el que han trabajado duramente para que el jugador competitivo disfrute de ellos desde el primer día.
Esta nueva entrega de la franquicia, pone a nuestro alcance una verdadera experiencia de simulación de conducción, mostrando un apartado gráfico que luce majestuoso y una jugabilidad que nos hará sentir como si conducieramos un verdadero coche de competición. Muestra de ello es la repentina subida de revoluciones de los ventiladores de la consola como si del motor de nuestro vehículo se tratara antes de cada competencia, llevando a nuestras máquinas a su máximo rendimiento. Al menos eso ocurre en la versión de PlayStation 4, que es la que en este caso hemos analizado.
Un gran trabajo audiovisual
Ya en la pista, nos encontramos con una verbena de detalles que nos llevarán al fallo si es que nos si nos entretenemos más de la cuenta fijándonos de ellos. Sombras, reflejos, lluvia, charcos, meteorología cambiante, marcas en el asfalto y un sin fin de detalles que me podría llevar un buen puñado de líneas si me quisiera nombrarlas a todas, y todo gracias al veterano y funcional motor gráfico Madness Engine, que junto al nuevo sistema LiveTrack 3.0 -una de las grandes novedades de la entrega- le proporcionan la vida necesaria a cada uno de los circuitos.
Un póquer de ases que casi roza la perfección tecnológica, dejándonos una y otra vez al boquiabiertos, haciéndonos sudar en cada vuelta y obligándonos a exprimir al 100% nuestras habilidades de conducción. En Project Cars 2 no hay carrera perfecta, cada vuelta es mejorable y nosotros mismos nos daremos cuenta de esto mientras jugamos por conseguir un mejor tiempo de vuelta.
En cuanto al apartado sonoro, no es que estemos ante lo más destacado del videojuego, contamos melodías relajantes a través de los distintos menús que amenizan nuestra navegación a través de ellos. Estas son totalmente suprimidas dentro de las carreras, ya que lo que realmente nos interesa es escuchar los sonidos del motor -que por cierto están muy conseguidos en cada uno de los modelos- u otros sonidos que de verdad nos importen dentro de la competencia, como paso por pianos, instrucciones del jefe de equipo o copiloto. Estas verán reproducidas desde el altavoz incorporado en el gamepad, proporcionando la sensación de comunicación más directa e información sin que tengamos que buscarla en la pantalla. Si bien hay que decir que estos comentarios son totalmente en inglés, aunque no se echarán en falta una localización al castellano ya no es demasiado trascendente.
Dirigido a los apasionados de la simulación
Si bien hay que decir que Project Cars 2 está concebido a un público en concreto, y ellos son los amantes de los videojuegos de motor. Y es que si no eres un experimentado jugador del género te costará digerir los primeros momentos del juego debido a su extremo realismo, incluso algo más que en el Project Cars original. Todo, absolutamente todo, afecta a nuestra conducción, hasta el más ínfimo detalle es capaz de tirarnos por los suelos el tiempo de una vuelta. Esto hará, sobre todo a los más impacientes, que terminemos por frustrarnos si no nos tomamos las primeras horas, días, semanas, con suma tranquilidad, estudiando tanto los circuitos, como el comportamiento de los distintos vehículos en los distintos tipos de asfalto.
En cuanto a la sensación de velocidad, solo podemos decir que es total, sobre todo su usamos las vistas en primera persona. Además, el dualshock transmite en todo momento tanto las vibraciones del motor como las del tipo de terreno por donde nos desplazamos. Los controles son sensacionales; la sensibilidad del acelerador, del freno y la dirección son bastantes realistas, es por ello el que recomendamos tener sumo cuidado con los sobrevirajes y subvirajes, ya que un paso en falso puede sacarnos de la carrera en cualquier momento. Tengo que decir que no hemos tenido la oportunidad de disfrutar de Project Cars 2 con ningún tipo de volante, por lo que si se nos presenta la oportunidad, os transmitiremos las sensaciones con algún comentario.
Circuitos con gran nivel realismo
En esta nueva entrega, Slightly Mad Studios también ha apostado por aumentar el número de circuitos disponibles a más del doble, añadiendo a las ya disponibles en el original, veinte nuevas pistas con gran nivel de detalle y aumentando el total de circuitos disponibles hasta 60. Sesenta localizaciones y más de un centenar de trazados que han sido cuidadosamente seleccionadas y escaneadas con sumo detalle para reflejar las 9 disciplinas del automovilismo y 29 series que incorpora Project CARS 2. Aquí es donde sale a relucir el nuevo sistema LiveTrack 3.0 marca de la casa, que proporciona gran realismo a la conducción, sobre todo en como afectan todos los elementos externos, como baches, charcos, temperatura del asfalto, grava o peralte a la conducción, tal y como lo pasaría en la vida real.
Así mismo, en el nuevo trabajo de Slightly Mad Studios nos encontramos con algo más de 180 modelos de coches distintos, divididos en 9 disciplinas y 29 marcas de gran realismo. Aunque la variedad de vehículos nos parezca algo demasiado relevante, es un handicap a reseñar la incorporación de vehículos clásicos de distintas épocas, sacando alguna que otra sonrisa a los más apasionados del motor. Y es que cada uno de ellos tiene su propio comportamiento en carretera, situación del motor, equilibrado, potencia… Cada coche nos obligará a adaptar nuestro tipo de conducción dependiendo de sus características. Aún así, me gustaría reseñar que se hace muy divertido ir probando cada uno de ellos aunque eso nos cueste más de un tirón de pelos.
Modos de juego, pocas novedades respecto a lo ya visto
Para finalizar, y hablando sobre sus modos de juego, Project Cars 2 añade nuevos modos, aunque si nos ponemos serios no es que haya aportado nada nuevo a la franquicia. En primer lugar tenemos el modo Trayectoria. En él creamos un perfil de piloto con el fin de que tras seis temporadas, divididas en seis niveles de dificultad, con el fin de terminar convirtiéndonos en una leyenda del automovilismo. A través de cada una de las temporadas nos pueden llegar ofertas de otras marcas, y dependiendo de nuestro nivel de afinidad con la nuestra, nos llegarán participaciones en eventos de fabricantes o de invitación. En ellos aprovecharemos para mejorar nuestra afinidad con la marca, conducir una selección de sus coches, y si todo sale bien, tal vez terminar consiguiendo un nuevo coche.
También cuenta con el modo evento personalizado, en el que contaremos con infinidad de opciones para crear una partida que se ajuste a nuestras necesidades. Duración, variables meteorológicas, hora, parada en boxes, IA del rival, reglas… Un sin fin de opciones que pueden dar lugar a un número casi infinito de posibilidades. Y como tercer modo de juego nos encontramos con el modo online, donde nos volvemos a encontrar con los ya conocidos eventos de temporada, donde competiremos contra otros jugadores. Este modo cuenta con el sistema de reputación online, el cual es ni mas ni menos que una variable entre deportividad y competitividad, resultando un nivel de reputación del jugador. Este nivel se podrá tener en cuenta a la hora de acceder a ciertos eventos online como partidas privadas.
En resumen, Project Cars 2 es un paso más en cuanto a simulación se refiere respecto a lo que vimos en la primera entrega de la franquicia. Un título dirigido a los fans mas hardcore de los simuladores de conducción que exigirá en todo momento sacar a relucir nuestras mejores habilidades, ya sea disfrutando del modo Trayectoria, corriendo en emocionantes competiciones eSport o simplemente pasando la tarde jugando con nuestros amigos.
Si bien hay que decir que pese a los pequeños fallos técnicos, algún que otro bug y comportamientos extraños de la IA durante las carreras, además de un aspecto sonoro corriente, para nada hace disminuir la experiencia de conducción, que resumiéndola en una sola palabra nos parece «magistral». Un duro competidor de dos grandes lanzamientos que están por venir como Gran Turismo Sport y Forza Motorsport 7, y del que seguro os hará disfrutar minuto a minuto de una gran experiencia virtual al borde de la realidad, pero eso sí, hay que tener mucha, mucha, paciencia.
*Siguiendo nuestra política de actuación, este análisis ha sido posible gracias a la copia de prensa cedida por Bandai Namco.