Sackboy: Una aventura a lo grande – Análisis PC

Sackboy: Una aventura a lo grande

No da puntada sin hilo.

El bueno de Sackboy regresa por todo lo alto con un plataformas 3D cargado de ideas nuevas, pero sin alejarse del espíritu de la saga.

Little Big Planet siempre ha tratado sobre la creatividad, el poder de la imaginación y la capacidad de las personas para soñar cualquier cosa por muy disparatada que sea siempre y cuando eso les haga felices. A lo largo de tres maravillosos juegos todo esto se veía aderezado con un espíritu muy simpático que utilizaba todos sus recursos para divertir de la mejor de las formas a todo aquel jugador que se atreviese a meter un pie en su fantástico mundo. Jugar esta saga es jugar con una sonrisa en la cara, ilusionarse por cada nivel, la posibilidad de crear y llamar a tus amigos para pasar una tarde entre risas con los adorables Sackboys. 

Es por estas cosas que tenía cierta preocupación detrás de la oreja a la hora de jugar Sackboy: Una aventura a lo grande. Tenía miedo de que no supiese adaptar la esencia de la saga, de ese paso hasta las plataformas 3D dejando al margen ese llamativo énfasis en el diseño de niveles por parte de la comunidad. Y digo tenía porque este juego me ha liberado de cualquier duda de un guantazo desde el primer nivel. Os lo cuento en el siguiente análisis. 

Mundo Artesano está en peligro 

De la mano de Sumo Digital llega Sackboy: Una aventura a lo grande, un nuevo juego que se desprende de la tónica habitual de la saga Little Big Planet ofreciéndonos una aventura de plataformas 3D. Con una calidad y composición propios de una película de Pixar, una cinemática nos presenta brevemente el punto de partida de la historia del título. 

Creado a partir de todas las ideas y pensamientos creativos que se han tenido encontramos al planeta Mundo Artesano y, dentro de este planeta, la aldea Tricotosa, hogar de los Sack (si, nuestros amiguetes de tela). Un día como otro cualquiera, un malvado muñeco de trapo llamado Vex secuestra a todos los Sack para obligarles a construir una máquina que le permitirá corromper todo Mundo Artesano y hacerse con el control de todo: El Patasarribador. Por suerte, un Sack ha escapado de las garras de Vex en el último momento, nuestro protagonista Sackboy, quién tendrá que evitar que el villano lleve a cabo sus planes y así salvar Mundo Artesano y a sus amigos. 

Se le ven las costuras, pero que buenas costuras 

De esta forma arranca Sackboy: Una aventura a lo grande, un juego que nada más empezar deja claro que estamos ante unos gráficos y una dirección artística espectaculares. No se le pueden poner pegas en este sentido. Presenta un universo completamente formado por elementos como papeles, cartón, lana, cremalleras y demás cosas que utilizaríamos para hacer manualidades. Al igual que sucedía en las anteriores entregas de Little Big Planet, todo en este título parece construido a partir de materiales que podríamos encontrar en una papelería. Tanto los escenarios, como los personajes y los enemigos parecen ser perfectamente replicables en la vida real si es que alguien se atreviese a intentar recrearlos. Se trata de una estética que mantiene la esencia de Little Big Planet a la perfección a pesar de haber pasado de jugar en niveles en dos dimensiones a unos mucho más amplios en tres dimensiones. Es realmente increíble como se las apaña para lograr transmitir, tanto en lo jugable como en lo visual, las mismas sensaciones que antaño y mantener intacto el espíritu de Little Big Planet pese a todos los cambios y añadidos de esta entrega. 

Sucede que con el salto a las plataformas 3D se da un cambio en la forma de jugar y en la fórmula. Sin embargo, a poco que vayamos superando los primeros niveles el título se percibe como una adición a la franquicia perfectamente natural. Un nuevo paso en otra dirección distinta que prescinde de un memorable editor de niveles, pero que añade muchísimas otras ideas a la receta original. Ahora podremos correr, saltar, rodar, agarrar y atizar en unos entornos mucho más grandes que desbordan creatividad por los cuatro costados. Desde un mapa general dividido en mundos accederemos a una sucesión de fantásticos niveles cuya temática se corresponderá con la del mundo en el que se encuentren.  

Los escenarios que componen estos niveles están repletos de elementos con los que interactuar y resulta prácticamente imposible dejar de explorar y asombrarse por cada detallito que en encuentres, por muy pequeño que este sea. El diseño de los niveles es redondo, no puedo recordar uno solo que no me haya gustado ni tampoco puedo afirmar que haya jugado dos fases iguales. Se hace evidente que, si los desarrolladores se han atrevido a crear un título como este sobre la creatividad, es porque la creatividad les sobra. Avanzar hasta la siguiente fase siempre es emocionante porque nunca sabes que sorpresas esperan, porque el ritmo no decae y mucho menos la calidad o la diversión. Sackboy: Una aventura a lo grande es todo lo que necesita ser: divertido. En general, la experiencia se resume en un espectáculo de colores, originalidad, secretos y una imaginación inagotable con el que no puedes dejar de disfrutar en ningún momento. 

Coleccionar, coser y cantar

Pero no todo es corretear por ahí y ya, también hay que parar un momento y poner a Sackboy bien guapote para la ocasión. En la tienda de Zumidio, un personaje que conoceremos al principio del juego, podremos comprar (a cambio de una especie de cascabeles) todo tipo de prendas de ropa con las que personalizar de mil formas a nuestro protagonista. Aunque el juego viene de serie con un buen puñado de trajes inspirados en otros videojuegos como Ratchet and Clank, The Last of Us o Death Stranding, el resto de los cosméticos tendremos que desbloquearlos consiguiendo las máximas puntuaciones posibles en cada nivel.  

Y es que hay mucho por hacer y desbloquear. Para empezar, conviene hacerse con todas esas pequeñas esferas que abundan en cada nivel, pues son estas las que harán aumentar nuestra puntuación final y determinarán si desbloqueamos o no esos accesorios tan molones. Las recogeremos a montones mientras avanzamos y cuando acabemos con enemigos, pero si queremos las recompensas más interesantes toca estar al loro y amortizar los multiplicadores de puntuación que hallemos. Por otra parte, también es imprescindible inspeccionar a conciencia cada rincón si queremos hacernos con el auténtico 100%. En las fases que juguemos habrá objetos coleccionables escondidos como, por ejemplo, nuevos gestos, cascabeles para gastar en la tienda o esferas especiales que además nos permitirán avanzar hacía nuevos niveles si conseguimos un mínimo de estas. Además, en muchas ocasiones estos coleccionables estarán en pequeñas salas ocultas que podemos encontrar a poco que busquemos bien a nuestro alrededor. Mención aparte merece otro tipo de elemento desbloqueable: las pruebas de desafío de los caballeros de la puntada. Estas pruebas se consiguen haciéndonos con unos cubos que están ubicados en ciertos niveles y que nos permitirán acceder a una serie de pequeños desafíos como carreras contrarreloj. En pocas palabras, que en este título se incentiva rebuscar bien y no dejar ninguna esquina sin remover.  

¿Y qué mejor forma de explorar unos parajes tan bonitos que hacerlo mientras escuchas una banda sonora a la altura? Es momento de hablar de uno de los puntos más potentes de Sackboy: Su música. Lejos de ser un aspecto secundario en la aventura, la música se presenta como otro personaje protagonista durante nuestra partida. Tanto es así que algunos niveles se jugarán al compás de la canción que este sonando de fondo, dando lugar a una experiencia de juego sencillamente mágica. Podéis esperar éxitos conocidos de artistas como Bruno Mars, pero también otras fabulosas pistas compuestas para la ocasión. En términos generales, todos son tremendos temazos. Escuchar la banda sonora de Sackboy mientras juegas es similar a cuando descubres un nuevo grupo que te flipa y comienzas a ponerte un hit tras otro. Es bastante difícil jugar y no mover la cabeza o los pies al ritmo de alguna de sus canciones más marchosas. Tengo la banda sonora de este título al completo en mi mejor playlist de Spotify, así de buena es.  

Una aventura imprescindible  

Al final y por sorpresa nos hemos topado con un plataformas 3D redondo que no solo es fabuloso, sino que es de lo mejor que se ha publicado en su género. Un must have que no puedes dejar escapar a poco que te atraiga su propuesta porque, ya sea jugando en solitario o con hasta tres amigos, Sackboy: Una aventura a lo grande deja patente por méritos propios que es un título que le sostiene la mirada a los grandes y hasta al mismísimo Super Mario 3D World. Sin previo aviso, pero con contundencia, el sucesor de Little Big Planet se presenta como un ejemplo a seguir en lo que a divertir y sorprender se refiere.  

Conclusión

Sackboy: Una aventura a lo grande es uno de los mejores juegos que puedes encontrar en el género de las plataformas 3D. Destaca de una forma impresionante su capacidad para divertir y asombrar constantemente al jugador sin dejar de evocar las mismas sensaciones que experimentamos con el resto de entregas de la querida saga Little Big Planet. Es un fantástico y pequeño gran mundo formado por buenas ideas y creatividad que no hace falta soñar porque ya es una realidad. 

9

*De acuerdo con nuestra política, informamos a nuestros lectores que este título ha sido jugado gracias al envío de una copia de prensa por parte de Precision Comunicacion.