Commandos en el periodo Edo
Shadow Tactics: Blades of the Shogun se puso a la venta a primeros de año para PC a través de Steam, obteniendo una gran acogida por la comunidad de jugadores de la plataforma de Valve. Eso hizo que Daedalic se planteara hacer llegar su trabajo a las consolas de nueva generación, PlayStation 4 y Xbox ONE, convirtiéndose en un verdadero reto adaptar la jugabilidad -teclado y ratón- a los típicos gamepads de consolas. ¿El resultado? Un trabajo muy cuidado por parte del equipo de desarrolladores manteniendo la experiencia de juego del título original.
[dropcap]H[/dropcap]ace tan solo unas semanas, la distribuidora Meridiem Games nos hacía llegar una copia de Shadow Tactics: Blades of the Shogun, el último trabajo de los chicos de Daedalic Entertainment, la editora y desarrolladora alemana detrás de títulos como Machinarium, Tales of Monkey Island… Un videojuego que bebe directamente de las aguas del clásico de estrategia Commandos y que tras largas horas de juego, exigió de mi persona sacar mis mejores habilidades para superar los múltiples desafíos que nos ofrece.Primeramente me gustaría aclarar que ya hacía bastante tiempo que no tenía el placer de echarle el guante a un título del género en cuestión, y para nada lo hice a desganas, es más, jugar Shadow Tactics me hizo recordar de lo divertido de un género que ya no es tan habitual de ver en los catálogos actuales. Se presenta como un videojuego del género de estrategia táctica en tiempo real, en el que tendremos que controlar un equipo de asesinos con el fin de superar una serie de misiones que nos irán encomendando. Y es que todo esto nos sonará a la típica serie norteamericana, un grupo de soldados tendrán que enfrentarse a todo un ejército. ¿Os suena verdad?
Poca ambientación en un inicio algo confuso
Los primeros minutos de Shadow Tactics se pueden llegar a parecernos algo confusos, y es que sin una introducción previa, nos sueltan y sin saber muy bien el porqué, en medio de una trifurca en el Japón feudal del siglo XVII. Pero esa sensación se irá desvaneciendo a medida que vamos avanzando en su primera misión mientras seguimos las directrices que nos irán llegando a modo de tutorial: correr, saltar, andar sigilosamente, matar y demás acciones típicas de un maestro del combate y el sigilo, conociendo poco a poco a los demás personajes que formarán nuestro equipo mientras que Mugen, uno de los personajes principales del juego, va introduciéndonos en el argumento del juego.
Tras esa primera misión el argumento del juego poco a poco va tomando forma con algunas pinceladas van llegando a modo de vídeos y escenas ingame de conversaciones entre personajes y, aunque no es muy consistente, da la sensación de estar bien ambientado en la época donde transcurren los echos. Nos situamos en el año 1615, cuando un nuevo shogun se hace con el poder en Japón e impone la paz en toda la nación. En su intento por luchar contra las conspiraciones y rebeliones, recluta un grupo especialistas en el arte del combate con habilidades extraordinarias para matar y espiar. De este mortífero equipo d especialistas depende que el shogunato quede libran de conspiraciones y limpie su reino de cualquier intento de sabotaje.
Abanico de posibilidades para culminar la misión
En Shadow Tactics: Blades of the Shogun, dirigiremos un equipo de mortíferos asesinos del japón medieval: Mugen, Aiko, Yuki y Takuma. Cada uno de ellos con sus características y habilidades personales a los que tendremos que proponernos dominar si no queremos sucumbir en las distintas misiones. Del buen uso de cada uno de ellos y depende nuestra victoria a través de los distintos niveles.
Cada una de las misiones serán realizadas por un equipo de personajes preestablecidos, por lo que no tendremos posibilidad de elegir a los componentes del equipo usar. Esto limita un poco las posibilidades, ya que si pudiéramos elegir nosotros mismos el equipo le hubiera proporcionado algo más de dinamismo, pero aparte de ese detalle, el modo de ejecutarla es totalmente libre por lo que para nada nos veremos limitados en ese aspecto. A partir de ese momento todo dependerá de nuestra audacia en el campo de batalla.
Perder la paciencia, podría resultar fatal para la misión.
En Shadow Tactics nuestro mayor enemigo no es la dificultad de juego, que ya se muestra más peliaguda a medida que progresamos por los niveles, sino la paciencia, esta será la base de todo. Al comenzar el juego nos darán a elegir entre tres niveles distintos de dificultad, que también se podrán cambiar antes del inicio de cada misión, pero de nuestra paciencia, que vuelvo a recordar, hay que tener mucha, depende que superemos a cada encomienda.
Cada una de las misiones tendrá un objetivo u objetivos principales, los cuales son obligatorios para concluir la misión. A estos se le unirán una serie de insignias que se desvelarán una vez se superen las misiones, invitando al jugador a volver a realizarla para conseguir los que nos queden por superar. Insignias como eliminar guardas haciendo creer que fue un accidente, superar la misión sin ser visto, o lo mismo pero sin utilizar la función de guardado rápido son algunos de los retos que nos propondrán estas insignias.
Sé un maestro del sigilo
Pero no solo de la paciencia depende de nuestro éxito; Observar, esperar y actuar, son las tres máximas que nunca debemos olvidar durante el juego. Antes de tomar acción inequívocamente, siempre es recomendable observar el entorno y enemigos. Pero también tienen mucho que ver de las opciones generales del juego. Para observar al enemigo tenemos a nuestro alcance una serie de opciones para hacer el estudio de la situación mediante el modo ver. Podremos girar, ampliar o fijar la cámara con el fin de localizar a los enemigos o ver su cono de visión, usar marcadores para estudiar si la línea de visión de los guardias llega a un punto en concreto.
La observación, el sigilo, el estudio del enemigos y entorno serán factores determinantes para superar los distintos niveles.
Por otro lado, el modo sombra, también se presenta como una característica muy útil a la hora de tomar acción. Gracias a ella podemos grabar los movimientos de cada uno de los personajes y coordinarlos para realizar un ataque simultáneo sin que nos detecten.
Pequeñas carencias que no afectan a la jugabilidad
Aunque estéticamente el videojuego no es nada del otro mundo, su motor gráfico Unity hace su trabajo perfectamente. Sin que estén a la altura de juegos de gran presupuesto, los escenarios y personajes se muestran bastante detallados y de buena calidad, todos ellos dibujados a mano y con sumo detalle y belleza que acierta perfectamente con la estética nipona de la época.
Por otro lado, en cuanto a su apartado sonoro nos encontramos con melodías tradicionales de la época que sumergen al jugador en los acontecimientos del juego.Estas irán cambiando según la acción que se esté desarrollando en ese momento, dejando las más vivas para momentos de acción, a diferencia de momentos más sigilosos que sonarán unas más pausadas. Así mismo, los efectos de sonido, ataques, silbidos, saltos y demás acciones se verán bien acompañadas con un buen repertorio, que además de aderezar este apartado se tienen que tener muy en cuenta si no queremos que nos descubran. Las voces del juego (en inglés y japonés) podríamos decir que a veces nos parecerán algo repetitivas, sobre todo cuando hacemos cualquier ruido o movimiento que alerte a los guardias.
Conclusión
En conclusión, Shadow Tactics: Blades of the Shogun es un título dirigido al pequeño sector del género de estrategia táctica, del que ni decir se tiene que bebe de las aguas del mítico Commandos. Si buscas descubrir un género nuevo o quieres volver a disfrutar de un género ya no tan frecuente en consolas, tenemos claro de que Shadow Tactics será un juego con el que disfrutarás muchísimo. Sus más de 25 horas de juego en el modo campaña, que se ampliarán si te propones conseguir todas y cada una de las insignias y trofeos, se convertirán en un verdadero reto para los jugadores más hardcore que buscan títulos en el que un paso en falso puede costarnos la vida (partida).