Sonic Superstars

Sonic Superstars – Análisis

Una bocanada de modernidad al mítico clásico

Me considero una persona afortunada de haber tenido una niñez con míticos clásicos de la Mega Drive de Sega, de entre los cuales destaco a Sonic the Hedgehog, un plataformero que nació como competidor directo de Mario Bros, mas, por alguna extraña razón con el paso de los años fue perdiendo ese rumbo 2D al abrazar la modernidad 3D.

Con el exitoso Sonic Mania, Sega tiene clara su senda a seguir, por lo que ahora de la mano de Arzest y Sonic Team nos traen Sonic Superstars, al día de hoy la fórmula clásica del popular manchón azul sigue siendo tan apreciada como disfrutada por jugadores veteranos y aquellos recién llegados, luego de haber disfrutado de un adelanto en Gamescom que me dejó con buenas sensaciones, me toca mojarme de lleno. Vamos al lío.

Su historia es sencilla y divertida, enriquecida por los nuevos villanos

Es importante mencionar que, en redes sociales Sonic Superstars nos ha ido compartiendo su prólogo en donde los villanos y se puede ver dando clic aquí, el trío peligro son presentados junto con sus motivaciones que los llevan a causarles problemas a Sonic y sus amigos.

La aventura nos lleva a la isla Northstar, un archipiélago en medio del océano en donde el Dr. Eggman vuelve a sus fechorías y contrata al cazarecompensas Fang para librarse de la amenaza de Sonic, Fang viene acompañado de una nueva integrante llamada Trip, personaje que conforme progresamos en la aventura vamos conociendo con más detalle y su encantadora torpeza se vuelve entrañable.

A lo largo de la campaña los villanos en turno hacen de las suyas para impedir que Sonic y sus amigos rescaten a las tiernas criaturas gigantes de las Islas Northstar que se encuentran atrapadas en las diabólicas Badniks del Dr. Eggman, al tiempo que Fang nos da caza mientras recorremos los niveles.

Debo decir que la narrativa no es nada fuera de lo ya visto en la saga Sonic, mas, los nuevos villanos aportan suficiente frescura para mantenernos enganchados hasta su divertida conclusión.

Su jugabilidad sigue ese emocionante plataformeo 2D potenciado por las Chaos Emeralds

Sonic Superstars mantiene su esencia clásica plataformera, rápidamente se nota que se ha aprendido de lo vivido con Sonic Mania al mejorar las físicas ya establecidas al aprovechar el impulso de velocidad obtenido al recorrer los niveles.

Desde el inicio, el juego nos permite jugar con Sonic, Tails, Knuckles y Amy, así como un quinto personaje extra con su propia capa de historia que se desbloquea una vez que superamos la campaña.

Todos y cada uno de los personajes tienen sus propias características jugables. Sonic se destaca por su gran velocidad e impulso rodante. Tails puede volar para llegar a zonas inalcanzables y explorar con calma el nivel. Knuckles puede descender planeando y escalar paredes, y Amy tiene el preciado doble salto y su confiable martillo de ataque. Cada personaje hace que la experiencia se sienta distinta sin que se pierda esa magia que hace destacar a Sonic a lo largo de los años.

La aventura en las islas Northstar está dividida en 11 zonas, que a su vez se ven integradas por dos actos, algunos con un tercero para un personaje en particular y otros conformados por un único acto que al final nos da el gran total de 26 niveles individuales, que en mi opinión es una longitud bastante buena.

Cada zona que finalicemos nos lleva a una pelea contra un mini-jefe o un jefe, estas batallas son realmente creativas y aprovechan las habilidades de nuestros personajes. Además de estar conformadas de dos fases que elevan la dificultad, algunas batallas requieren pericia para esquivar los ataques y encontrar el punto débil.

Mientras que en otras será necesario movimientos precisos mientras corremos a toda velocidad, en otros estaremos en pantallas de desplazamiento automático, incluso me sorprendió con un enfrentamiento estilo infierno de balas, algo bastante nuevo y jamás visto en la saga Sonic.

Si bien las batallas son complicadas, en ningún momento llegan a percibirse injustas, salvo dos excepciones. La del jefe final que es la más larga y desafiante, así como el jefe oculto dedicado al quinto personaje que obtenemos al finalizar la campaña, el cual me hizo pasar un mal rato.

Nos encontraremos con niveles especiales, en los que tendremos la tarea de recolectar las siete Chaos Emeralds mientras nos balanceamos a través de unos nodos en espacios 3D siendo necesario recolectar anillos para incrementar el tiempo disponible, estos niveles me han fascinado por su sencillez.

Otros de los niveles especiales son unos que tienen un estilo Pinball, donde tendremos que movernos en una perspectiva cenital hasta conseguir las medallas, con el peligro inminente de caer al vacío si fallamos. Las medallas son la divisa interna cuyo único uso es comprar partes robóticas para personalizar nuestro robot en el Modo Batalla.

En su novedad jugable, las Chaos Emeralds juegan un papel adicional en los poderes que nos otorgan, permitiendo que invoquemos clones que atacaran a los enemigos en pantalla o recolectar ítems lejos de nuestro alcance. Ralentizar el tiempo o dispararnos como si fuéramos una bala de cañón, entre otros que nos permitirán acceder a rutas secretas que me han molado mucho.

Es importante mencionar que las Chaos Emerald tienen un uso limitado para evitar su abuso, siendo utilizado solamente una vez por cada punto de control alcanzado.

Un modo multijugador que adereza la experiencia de maravilla

Ahora, en el multijugador es donde el juego me ha dejado con una sensación agridulce. Podemos jugar de manera local hasta cuatro jugadores, en donde podremos avanzar en conjunto, el liderazgo lo tendrá aquel personaje que lleve la delantera como si fuera una carrera, mientras que el resto podrá reincorporarse en caso de quedarse atrás en el camino.

Lo anterior me ha parecido fenomenal porque cualquiera del grupo puede llevar el liderazgo y contribuir en el progreso sin que se tenga que sentir como si fuera una carga.

Lamentablemente, es fácil perderse en el camino, ya que los senderos en Sonic Superstars son bastante crípticos, lo cual complica el progreso al no tener una señalización constante hacia la dirección que debemos seguir, ocasionalmente nos encontraremos flechas que nos guíen, mas, la mayor parte del tiempo es el instinto nuestro guía.

En el modo Batalla podremos jugar con nuestro robot personalizado en contra de otros jugadores gracias a su función de juego cruzado con la simple facilidad de compartir un código de acceder, mi gran pega aquí es que no hay salas públicas, lo cual se ve muy desaprovechado sino se tienen amigos que posean el juego.

Sino tenemos amigos, podremos jugar contra bots. Este modo está conformado por tres eventos; el primero será el objetivo recolectar mayor cantidad de monedas, el segundo una carrera y el último una batalla campal. Realmente me ha encantado este modo al ser una experiencia distinta a la campaña que aprovecha sus mecánicas de una manera distinta.

Mi única molestia es que los ítems cosméticos para nuestro avatar cuestan un pastizal, lo cual nos obliga a rejugar la campaña hasta que consigamos las monedas necesarias.

Gráficamente es hermoso siendo fiel a su estilo con un toque de modernidad

Sonic Superstars sigue la línea establecida en sus niveles con estilos temáticos y les inyecta una nueva vida al dotarles de nueva personalidad al agregar distintos obstáculos y nuevos badniks. Desde junglas a carnavales, habiendo cierta familiaridad a pesar de ser escenarios nuevos.

Es destacable el estilo de arte 3D que se aleja del arte pixelado de Sonic Mania, el cual luce espectacular, mención especial a la zona inicial Bridge Island que me trajo gratos recuerdos de Green Hill en su diseño.

El diseño de niveles está muy bien pensado, al haber muchas bifurcaciones y caminos opcionales que aprovechan las habilidades de nuestros personajes, asimismo, cuenta con una profundidad 2.5D en la que en ciertos niveles pasaremos a esa segunda capa de fondo recorriendo el nivel.

Mención especial al nivel Cyber Station que nos lleva a un hermoso mundo digital en donde los enemigos y nuestros personajes lucen versiones pixeladas de enorme calidad. Es digno de alabarse la dedicación del estudio en darle variedad a los niveles haciendo satisfactorio el progreso.

El juego cuenta con pequeñas cinemáticas de animación 2D que son una completa bestialidad, en donde los personajes son muy bien representados con enorme detalle en sus expresiones, en donde se nota lo mucho que se puede expresar sin decir una sola palabra, es una pena que se aprovechó muy poco este recurso.

Debo decir que en principio me preocupaba la versión de Nintendo Switch, al ser notoriamente menos potente que el resto de las plataformas, afortunadamente mi miedo fue infundado y el juego corre a 60 fotogramas por segundo a una resolución de 1080p en modo Tv, mientras que en modo portátil va a 720p.

Unas de las sutiles diferencias es que Sonic Superstars luce un poco menos definido y un brillo mayor, aunque son detalles poco trascendentales. Y algunas pantallas de carga de 10 segundos entre zonas, mientras que navegando en los menús le toma 6 segundos, afortunadamente en términos generales no se ve gravemente afectada la experiencia y el juego corre como la seda.

Aquellos que obtengan la edición de lujo digital tendrán acceso a la galería de arte especial, así como fondos especiales para el menú principal y a una mini banda sonora digital que nos permite escuchar algunas de las canciones del juego.

Banda sonora cumple, sin tener un tema sobresaliente

La saga de Sonic siempre ha contado con más de un tema musical que se nos queda grabada en la mente, en esta ocasión el compositor encargado es Tee Lopes que en Teenage Mutant Ninja Turtles: Shredder’s Revenge logró sorprenderme y vuelve luego de su gran trabajo en Sonic Mania, mas, en Sonic Superstars no logra destacarse como es debido.

Es verdad que cuenta con una BSO muy buena y amena que acompaña de maravilla la temática de cada nivel, aunque en mi opinión le hizo falta esa alma que las vuelva pegajosas y nos tenga tarareándolas por horas.

El juego es bastante purista y no cuenta con actuaciones de voz, por lo que todos los personajes se comunican por señas, en cuanto a los textos nos llega en perfecto castellano con un tamaño competente para la lectura.

De acuerdo con nuestra política, informamos a nuestros lectores que este título ha sido jugado gracias al envío de una copia de prensa por parte de Plaion España. Se jugó actualizado a la versión 1.0.5A de Nintendo Switch.

Sonic Superstars
Sonic Superstars
Diversión azul para los fans
Sonic Superstars no es necesariamente revolucionario, mas, cuenta con lo necesario para llevar la franquicia hacia un rumbo que potencia la diversión, a lo que se le suma la nueva utilidad de las Chaos Emeralds. La gran novedad de jugarlo en modo cooperativo local nos permite compartir la diversión entre pequeños y grandes como nunca antes se había vivido, en la que cualquiera de los personajes puede llevar el liderazgo sin sentirse relegado. El diseño de niveles refina la fórmula de Sonic 2D con escenarios muy bien pensados para aprovechar las habilidades de los personajes, aunque a momentos es fácil perder el camino. El modo batalla se siente desaprovechado al no tener salas públicas. Su rendimiento en Nintendo Switch es muy bueno, aunque sufre un poco en su definición y leves pantallas de carga.
9
Épico