Nickelodeon All-Star Brawl – Análisis Switch

Nickelodeon All-Star Brawl

Un Smash Bros descafeinado con poco azúcar.

Vivimos tiempos de avivamiento, tras el más reciente anuncio de Nintendo, en donde se desveló el último personaje que llega a Super Smash Bros. Ultimate, siendo presentado Sora de la saga Kingdom Hearts. Mientras tanto, en otra parte del mundo, se dio a conocer otro juego de peleas que trae a la mesa esos grandes personajes animados de Nickelodeon.

Nickelodeon All-Star Brawl, supone traernos a los míticos personajes que amamos tanto mayores como jóvenes, mejor conocidos como Nick Toons. Finalmente, tenemos un título en donde repartir tortas como panes estando en los zapatos de Ren & Stimpy, Bob Esponja, las tortugas ninja, Avatar e incluso CatDog, entre otros. Siendo un juego que golpea nuestros sentimientos más nostálgicos en los lugares correctos.

Si comparamos el juego de Nickelodeon con el mítico Super Smash Bros Ultimate, es lógico tener un favorito, principalmente por la larga trayectoria forjada entre generaciones de consolas en donde paso a paso se ha ido refinando tanto el estilo de pelea como el cartel de personajes disponibles. Por lo que la comparación es injusta y nos toca reducir las expectativas lo máximo.

Un cruce de universos de Nick Toons que no saca lo mejor de sí

Viacom como compañía madre de Nickelodeon, es propietaria de una enorme cantidad de licencias de personajes animados, por lo que aquí no hay excusa que valga en justificar la reducida lista de personajes y el contenido tan pobre en escenarios que tenemos de frente.

En el primer momento que inicié Nickelodeon All-Star Brawl no pude evitar salivar de impaciencia por catarlo y jugar con mis personajes favoritos de cuando era un chaval. Sin embargo, mi decepción fue monumental al empezar a jugar y notar que lo que tenía enfrente no se le parece ni al Smash Bros de Nintendo 64, hablando en jugabilidad, porque en gráficos es otro tema que más adelante detallo.

Si tuviera que definir All-Star Brawl, sería como un juego en fase beta. En razón que, realmente es un título que tiene mucho potencial, con modelados 3D que emulan bien a los personajes con diseños que parecen juguetes y sus mecánicas de pelea son interesantes, aunque poco refinadas.

A primera vista, es un juego curioso, ya que los luchadores son fieles representaciones a sus versiones en 2D. Incluso, me atrevería a decir, que podrían hacer muñequitos de estos mismos diseños y sacar más pasta, algo estilo ‘amiibo’. Al estar probando los estilos de lucha, se nota que hay un enorme trabajo, ya que se siente convincente.

Danny Phantom, tiene un estilo de pelea aéreo que inevitablemente me hizo rememorar a Mewtwo. A pesar de esto, noto que no se aprovecha al personaje al máximo y es limitado en sus habilidades. Otros personajes como las tortugas; Leonardo y Michelangelo, tienen una apariencia fiel a sus versiones ochenteras, que fácilmente golpean directamente a la nostalgia. Otros personajes como Korra y Toph, tienen diseños que replican al dibujo animado sin ser muy detallados.

La jugabilidad atrae pero hay un desequilibrio muy marcado

Los escenarios de lucha molan, teniendo suficiente interacción para distinguirse, así como para agregar drama a las peleas con físicas diversas, como arenas movedizas. Los que llamaron mi atención fueron los dedicados a April O’Neil y las Tortugas Ninja, que tienen una buena iluminación y son llamativos para el combate. Mas, el resto de los escenarios no destacan lo suficiente.

Ahora, mirando con cuidado los personajes disponibles para elegir en Nickelodeon All-Star Brawl, se cuentan con grandes ausencias como Rocko de La Vida Moderna de Rocko, Tommy Pickles de los Rugrats, o los Padrinos Mágicos, que realmente serían atractivas adiciones y compaginarían muy bien con el concepto.

Con personajes como Nigel Thornberry, es difícil entender que esté aquí repartiendo hostias, cuando en Los Thornberrys no es el personaje principal. Aunque, lo que más deprime es que no existen voces para los personajes. En un juego de peleas, lo mínimo que se espera es que los peleadores hablen a viva voz. Lo que si se tiene es la voz de un narrador en inglés que sin mucha vida.

Lo más cercado a expresiones, son unas cajas de diálogo con unas cuantas líneas previo a la pelea. No se siente corazón ni se aviva la batalla. Otros personajes como Reptar, que solamente rugen en forma textual, sin un sonido real. Lo único que me hace pensar es que el desarrollo del juego fue tan apresurado que se espera arreglarlo en pos-lanzamiento a lo Cyberpunk 2077.

En lo musical, se nota un mínimo esfuerzo, como si no tuvieran los derechos para utilizar las correspondientes a cada personaje, ya que la mayoría de estas canciones en el título resultan ser poco memorables y genéricas.

Muchas horas de diversión garantizada para los enanos de la casa

Nickelodeon All-Star Brawl es un título que desaprovecha todo su potencial, sobre todo la mayoría de los personajes están desequilibrados, con ataques simples que causan más daño que un ataque especial, esto sin mencionar que no hay ítems.

En el apartado en línea, la conexión es muy estable, incluso en peleas con los cuatro participantes en activo. Algo que en el título de Nintendo de momento no se ha logrado de forma constante, abonado a esto al jugar con un mismo personaje en línea, no hay distinción por colores y al momento de pelear es difícil identificar al personaje cuando todos usan el mismo.

En Nintendo Switch, el juego corre a 30 fotogramas por segundo a una resolución de 1080p en modo TV, en modo portátil a 720p. Su rendimiento es regular y se juega bien, la única pega aquí son los tiempos de carga que van de 10 hasta 20 segundos. Espero se arregle con parches posteriores, ya que no estamos ante un juego que sea exigente en lo gráfico.

Conclusión

Nickelodeon All-Star Brawl es un título con un enorme potencial que no saca provecho de todos sus personajes, con muchas ausencias notables. Esto sin olvidar que no hay un correcto balanceo en los movimientos y algunos son más devastadores que otros.

La frustración estará al asecho en todo momento, por su falta de buen rendimiento, música genérica y ausencia de actuaciones de voz. Estamos ante un juego, cuyo público objetivo son los enanos de la casa poco exigentes que con ver a personajes coloridos y graciosos es suficiente para entretenerse. La adición de un modo historia con un estilo de dibujo animado habría sido un buen agregado para invitarnos a conocer a los personajes. Lo único que se puede esperar, es que las actualizaciones hagan lo suyo para arreglarlo y se vuelva un título que verdaderamente aproveche todo lo que tiene entre manos.

Nota: 7.5/10

*De acuerdo con nuestra política, informamos a nuestros lectores que este título ha sido analizado gracias al envío de una copia de prensa por parte de Dead Good Media.