The Callisto Protocol – Análisis

Striking Distance Studios es uno de esos estudios que aunque nos parezca joven, tiene un equipo con una enorme experiencia en el desarrollo de videojuegos. Dirigido por Glen Schofield, creador y productor ejecutivo del popular Dead Space, nos traen The Callisto Protocol, su nueva propuesta del género survival horror que nos sumerge en una aterradora aventura de terror espacial. Muchos han sido los que han intentado simular lo conseguido con grandes entregas del género como la mencionada franquicia Dead Space o Alien: Isolation sin conseguir esa sensación de tensión contínua pero, el nuevo trabajo de Schofield es otra historia. Permítanme llevaros por los claustrofóbicos e infestados de enemigos pasillos de la prisión de Ferro Negro en este análisis pero ¡cuidado! El terror puede esperarnos en cualquier esquina.

The Callisto Protocol se desarrolla en el año 2320, en Calisto, la segunda luna más grande de Júpiter, justo después de Ganímedes, y la tercera más grande dentro de todo el Sistema Solar. La aventura nos pondrá en la piel de Jacob Lee, un transportista espacial que, en uno de sus trabajos sufre un abordaje en su nave por una organización terrorista. Debido a los daños sufridos en su nave se estrellan sin poder salir de la órbita de Calisto. Tras el impacto, Jacob y uno de los asaltantes son los únicos supervivientes, siendo “rescatados” por los guardias de la prisión de Ferro Negro.

Inesperadamente, y por cosas del destino, Jacob se ve convertido en un recluso más de la prisión, insertándole un extraño dispositivo en la cabeza que le provoca una serie extrañas pesadillas. Al despertar, parece que algo grave ha ocurrido en esta extraña prisión, cantidad de presos y guardias desmembrados y horrendas criaturas sedientas de sangre ocupan los pasillos mientas Jacob, busca una manera de escapar de la prisión y descubrir que oscuro suceso ha provocado esta locura.

Así es como empieza esta terrorífica aventura. Acompañaremos a Jacob en su intento de salir con vida de su extraño cautiverio lleno de peligros mientras lucha contra esta locura que va en aumento, una oscura trama que parece sacada de Alien: el octavo pasajero o The Thing, y que pide prestadas las bases de los survival horror clásicos, con sustos por doquier y una tensión continua durante todo su desarrollo. Si bien Jacob tendrá que hacer todo lo posible para escapar de la prisión de Ferro Negro, desengranando sus secretos y buscando respuestas a todo lo que está ocurriendo en una aventura que ronda una duración de 12 horas, dividida en capítulos y que ofrece más contenido para los que se hagan con el pase de temporada, algo que se criticó bastante en los momentos previos a su lanzamiento.

En el desarrollo de la aventura, nuestro protagonista se encontrará con otros supervivientes, interactuando con ellos de alguna manera, ayudándolo o entorpeciendo su camino mientras se cruza con todo tipo de criaturas que aparecerán cuando menos nos los esperemos. A priori nos encontramos con tres modos de dificultad, tercer grado, segundo grado y máxima seguridad, junto a una jugabilidad que en principio parecerá simplona pero, en general, es bastante efectiva. La cámara en perspectiva de tercera persona recordará a grandes clásicos del género, y un sistema de combate para nada complicado que mezcla, los movimientos básicos de caminar, correr, trepar, o deslizarse en silencio, con ataques cuerpo a cuerpo, bloqueos, y ataques a distancia con cantidad de armas que se pueden intercambiar en pleno enfrentamiento.

Todo vale cuando nuestra prioridad es salir con vida de Ferro Negro, aunque no será para nada fácil. En The Callisto Protocol nos esperan enemigos (biófagos) de todo tipo con sorprendentes comportamientos de su I.A., que utilizan los conductos de ventilación para llegar hasta nosotros, otros son ciegas, que se limitan guiarse por los ruidos hagamos, y también los hay que evolucionan convirtiéndose en criaturas deformes más resistentes. Nuestro camino no será nada fácil por lo que será importante equiparnos lo mejor posible.

Si bien Jacob podrá mejor su equipo con el uso de créditos Callisto en las “reforjas”, que podrá conseguir pisoteando enemigos, abriendo cajas, taquillas o armarios de la prisión, sin duda será una actividad importante a la hora de mejorar sus armas y equipo. En estos dispositivos situados en distintas zonas de la prisión también podremos fabricar consumibles, nuevas armas y, si es necesario, vender objetos a cambio de más créditos. Tendremos al alcance un buen arsenal de armas; escopetas, pistolas, subfusiles o armas cuerpo a cuerpo, cada una con sus puntos fuertes y debilidades, así que todo dependerá de nuestra forma de jugar.

Pero todo lo que he comentado no son todas las virtudes de The Callisto Protocol, su apartado gráfico y ambientación están totalmente conseguidas. La desarrolladora ha logrado transmitir una atmósfera realmente asfixiante que hará que estemos en tensión en toda la partida. También destaca la calidad en el uso de las luces, sombras y el realismo de los rostros y sus expresiones, que ya quisieran tener muchos otros trabajos y el uso de la cámara con planos cercanos para ciertos momentos puntuales, como por ejemplo, el acceso o aperturas de puertas a ciertas zonas, el paso por conductos de aire, escenas, o las ejecuciones a manos de los biófagos, bastante espectaculares y a la vez de desagradables de ver.

Pero el apartado audiovisual no estaría completo si no fuera por el sonido, y la verdad es que deja una sensación agridulce, por un lado tenemos la ambientación sonora, que básicamente es magnífica, reproduciendo sonidos de todo tipo que nos mantendrán el corazón en un puño y quizás hasta nos pase desapercibida la banda sonora, que la verdad se limita a temas con percusiones y cuerdas desgarradas que transmiten sensación de soledad. Pero el punto negativo lo pone el doblaje en nuestro idioma que, a pesar de estar a la altura, la sincronización labial queda algo descolgada con lo que ocurre en la pantalla.

Hemos disfrutado de este gran título del género de terror y supervivencia espacial en PlayStation 5 y, la verdad es que corre perfectamente excepto en casos extremos con múltiples elementos en pantalla. En el menú de opciones podremos elegir entre dos modos de visualización; activando o desactivando el modo rendimiento. Como es normal, el modo rendimiento prioriza la tasa de fotogramas por segundo, y si lo desactivamos, se le da prioridad a la resolución y bueno, ya sabéis en cual seguramente corra mejor el juego. Pero en realidad todo no es perfecto, encontraremos algún que otro bug en el juego, sobre todo en las sangrientas escenas de muerte, que por cierto, son de lo más gore, o algún que otro momento puntual, pero en general el motor gráfico se comporta bastante bien no hay nada por lo que sea injugable.

Pero el rendimiento en PlayStation 5 no es solo una de sus cosas destacables, los de StrikingDistance no han querido desaprovechar las posibilidades del mando DualSense, utilizando el altavoz del mando para reproducir ciertos sonidos, como los de las comunicaciones por radio con PNJs, los gatillos adaptativos para simular la resistencia de los gatillos de las armas, o la vibración háptica para reproducir la sensación de los golpes, temblores del suelo, etc. Un detalle que siempre es de agradecer por los usuarios de la consola.

*De acuerdo con nuestra política, informamos a nuestros lectores que este título ha sido jugado gracias al envío de una copia de prensa por parte de Meridiem Games. Se jugó a la versión de PlayStation 5.