Siguiendo los pasos de su anterior entrega The Last of Us Part II recibe el tratamiento de remasterización un poco más de tres años después del lanzamiento original en junio de 2010 para PlayStation 4. Luego de su anuncio para muchos se encendieron las alarmas sobre si era necesaria o no una actualización.
Mas, Sony acertadamente nos ofrece una opción a modo de peaje para aquellos que contamos con la edición de PS4, pagando 10 euros, cantidad bastante más aceptable en lugar de pagar el precio completo de 49,99€ para acceder a las novedades técnicas y los agregados que a continuación detallo, vamos al lío.
Una potente narrativa que no deja indiferente a todos
A día de hoy probablemente sea rara la persona que no haya jugado The Last of Us Parte II, siendo una historia alabada y odiada por igual debido a las decisiones en su estructura narrativa. En esta remasterización no ha habido cambios a la historia y se mantiene tal cual se pudo ver en su momento.
Sin entrar en detalles para aquellos que probablemente no lo habéis jugado. A título personal me limito a deciros que me agradó la crudeza de la historia de Ellie y Joel, mas, no me pareció adecuada la manera en la que es desarrollada la presencia de Abby. Aunque, no hay duda que es una aventura que vale mucho la pena disfrutar que sabe marcar un antes y un después.
Una novedad agregada a la campaña son los llamados “Niveles Perdidos”, conformados básicamente por tres niveles en las ubicaciones llamadas Alcantarillas, fiesta de Jackson y caza de jabalíes, que en su momento fueron capados de la versión final durante el desarrollo del juego original y que aquí han sido reincorporados, acompañados de comentarios de los desarrolladores para compartirnos detalles nunca antes dados a conocer.
Es importante mencionar que los tres niveles agregados no aportan valor narrativo, lo cual explica que su otrora supresión, sin embargo, son intrigantes y me atrevería a mencionar que es de esos rellenos divertidos.
Sin retorno: un nuevo modo para perdernos durante horas
Este nuevo modo es una de las grandes novedades. Naughty Dog ha incorporado una modalidad de supervivencia de mazmorras (roguelike), en donde podremos jugar con uno de los diez personajes disponibles por primera vez son jugables. De entre los cuales destaca a Tommy, Dina y Lev, entre otros, que iremos desbloqueando mientras jugamos, un buen aliciente para ir probando a todos los personajes.
Por si nuevos personajes no es suficiente aliciente, también obtendremos nuevas apariencias para todos y cada uno de los personajes, habiendo diseños bastante curiosos como Ellie versión astronauta o Abby versión gótica, entre otros estilos variados que están limitados a camisetas.
Los distintos personajes tienen beneficios adicionales como desventajas únicas, como Abby que con cada golpe físico recupera vida, mientras que otros como Tommy no tendrán la posibilidad de realizar el esquivo o Yara que es acompañada todo el tiempo con Lev en el ataque, habiendo un buen equilibrio para no romper la experiencia.
Cada recorrido en Sin Retorno es generado de forma aleatoria tomando niveles de la campaña, ya sea enfrentando a miembros del grupo Serafitas o los paramilitares Lobos. Pudiendo elegir la dificultad y modificadores que elevan al nivel de desafío, pero que nos ofrecen una mayor recompensa.
Con nuestro progreso en el recorrido podremos mejorar a nuestro personaje, así como elegir el rumbo ramificado que mejor nos convenga; como repeler oleadas de enemigos, sobrevivir por un tiempo determinado, captura, entre otros, que culminan en un enfrentamiento con un jefe final que irá escalando con cada recorrido exitoso, ya que incluso nos podemos encontrar con algunos de los jefes infectados que vimos en la campaña.
Ninguna mejora se conservará, sin importar que hayamos superado o fracasado el recorrido, aunque una vez superado un enfrentamiento y al volver a la guarida podremos guardar ese progreso para continuar en otro momento el recorrido no finalizado.
Me ha parecido fascinante este modo Sin Retorno, ya que es verdaderamente adictivo dada su aleatoriedad en los enfrentamientos y lo versátiles de los personajes junto con los distintos modificadores, por lo que podemos empezar de menos a más.
Con más extras jugables que redondean la experiencia
Un modo bastante cuqui es el Guitar Free Play, en donde podremos interpretar con completa libertad melodías utilizando distintos instrumentos, incluso el propio Gustavo Santaolalla como personaje nos acompañará mientras creamos una tonada musical.
Asimismo, nos ofrece el modo velocista o “Speedrun” que me recuerda al modo Encuentros del anterior reimaginado The Last of Us para PS5, en donde podremos poner a prueba nuestras habilidades como superviviente y publicar nuestros tiempos para compararlos con otros jugones.
Es relevante destacar que los anteriores dos modos no están disponibles de inicio, siendo necesario tener progreso en la campaña para poder jugarlos sin problemas. Por fortuna, el juego nos permite importar nuestra partida de PS4, ya sea por medio de descarga por medio de la nube si contamos con suscripción activa de PlayStation Plus o podemos hacerlo vía USB guardándola desde la PS4 y luego transfiriéndola a la PS5.
Aquellos cazadores de trofeos, con alegría les puedo decir que todos los trofeos que ya hayamos conseguido en la versión de PS4, saltarán en automático al reconocer nuestro archivo de salvado, ya que The Last of Us Part II Remastered cuenta con su propio conjunto de trofeos.
Me habría gustado que, el modo Sin Retorno hubiera sido el modo multijugador que en su momento fue anunciado y cancelado, mas, pensando a largo plazo se tiene mayor calidad de vida en las condiciones que hoy es lanzado el juego.
Un mejoramiento gráfico que aprovecha las bondades de la PS5
The Last of Us Parte 2 en su día para PlayStation 4 lucia muy bien, aunque en lo jugable se notaba un notorio degrado gráfico, notándose un bajón al pasar de cinemáticas a lo jugable. Ahora en esta remasterización se ha pulido un poco más en lo visual, mas, no llega al nivel del recientemente reimaginado The Last of Us Parte I para PlayStation 5 que ya analizamos aquí.
Cuenta con dos modos visuales: Fidelidad que activa una resolución nativa de 2160p. Mientras que el modo Rendimiento nos ofrece una resolución de 1440p y 60 fotogramas por segundo, asimismo, nos permite jugar a una mayor tasa de FPS, siempre y cuando tengamos un monitor o TV compatible con la función de frecuencia de actualización variable.
Entre las mejoras estéticas, se nota un mejor retrabajo en las texturas al aprovechar la iluminación y las sombras para crear escenarios mucho más cuidados, con follaje mejor dibujado. Realmente se nota el esfuerzo de Naughty Dog en elevar la calidad visual. Las pantallas de carga han sido reducidas notablemente, aunque en el modo Sin Retorno toman alrededor de siete segundos de carga previo a cada encuentro.
En cuanto al DualSense, rápidamente se nota su incorporación como en todos los juegos producidos en la factoría de Sony, en donde aprovechan las bondades del mando con la vibración háptica al recibir los golpes o al repartir mamporros como panes entre los infectados o cualquier ser humano amenazante, también al caminar se siente la densidad de la superficie en el movimiento.
Los gatillos adaptativos tienen esa resistencia satisfactoria que se destaca cuando utilizamos el arco y las demás armas, de igual manera se ha aprovechado el audio para crear una mejor inmersión.
Una pega que he notado y que tal vez sea algo frívolo, es que el juego no nos ofrece todas las actuaciones de voz, desde luego están las voces originales en inglés y la española, pero si os da curiosidad conocer las voces de español Latinoamérica, no se tiene opción para catar la opción. Es decepcionante, teniendo en consideración que Sony es dueña de los doblajes y no nos permita descargarlos de forma separada, algo que no sucede con las versiones de PC.
*De acuerdo con nuestra política, informamos a nuestros lectores que este título ha sido jugado gracias al envío de una copia de prensa por parte de Precision Spain.. Se jugó actualizado a la versión 1.000.040 en PlayStation 5.
