FROGUN análisis

FROGUN – Análisis

Divertido plataformeo con sabor a nostalgia.

Es digno de admirar lo que ha logrado la escena de desarrolladores españoles independientes en videojuegos ofreciendo títulos que se ganan su lugar y simpatía entre los jugones a nivel mundial, esto al incursionar en una buena cantidad de géneros como el plataformero que, a pesar de ser una fórmula probada, puede fallar si no se ejecuta correctamente.

El desarrollador madrileño Molegato nos trae Frogun, un título que toma fuerte inspiración de los grandes plataformeros de la Nintendo 64 y de la primera PlayStation, de la mano de Clear River Games nos llega en formato físico para la Nintendo Switch y PlayStation 4/PS5.

Una historia sencilla que logra encantar para lanzarnos a la aventura

La narrativa nos pone en la piel de Renata Hopps, hija de dos reputados arqueólogos que han decidido dejarla atrás a su hija en la seguridad del refugio para explorar unas misteriosas ruinas de gran peligro. Mas, nuestra protagonista decide ir en contra de los deseos de sus padres luego de esperar dos días por su regreso y abandona el campamento para alcanzarlos en la expedición.

Armada con el más nuevo invento de sus padres; la Frogun, Renata inicia su aventura y durante el recorrido a través de mensajes descubriremos que sus padres se han extraviado. De igual manera nos encontraremos con otros PNJs, así como Jake y su serpiente Snatch que serán un reto constante para Renata.

Si bien, la narrativa es bastante sencilla, cumple muy bien al darnos la suficiente motivación para alcanzar su conclusión, aunque de igual manera recibimos detalles a cuenta-gotas, pudiendo pasar desapercibida.

Su jugabilidad simplificada es satisfactoria

Frogun es la mar de sencillo, un plataformero 3D en el que su belleza radica por su control reducido a dos botones; uno para hacer que Renata salte y otro para disparar la pistola parlante en forma de rana, es decir la Frogun. Con la cual podemos atrapar enemigos, coger objetos y engancharnos para llegar a plataformas ligeramente lejanas.

No hay opciones de dificultad, y desde el inicio el juego nos lanza al ruedo con pequeñas ayudas del mini-tutorial que nos explica muy brevemente las mecánicas. El plataformeo es bastante satisfactorio, al tener una cámara libre es necesario ajustar la perspectiva para dar los saltos más precisos.

Algo que me ha incomodado es que en ocasiones al estar en los bordes y querer dar un salto, no hay una rápida respuesta en el personaje y caeremos al vacío. Haciendo que tengamos que dar el salto antes de llegar al borde para dar un salto exitoso, lo cual provoca que perdamos un buen impulso.

El juego nos ofrece un apuntado automático que ayuda en cierta manera a no fallar con la Frogun, incluso con el botón Y nos permite un apuntado láser más preciso, en determinadas zonas los saltos lucen imposibles, por lo que nuestra fiel pistola-rana es indispensable para engancharnos y llegar a esos sitios de difícil acceso.

El juego nos ofrece distintos puntos de control representados por unas banderas que nos permitirán reanudar la aventura en caso de caer o ser derrotados, mas, su posición me ha parecido cuestionable al estar demasiado alejadas una de la otra, lo cual nos obliga a volver a recorrer largos tramos.

Lo anterior se empeora al encontrarnos zonas secretas que, si fallamos, en lugar de volver a la entrada de esa zona, volveremos hasta la última banderola que hayamos activado, teniendo que volver a recorrer toda la sección hasta el sitio secreto.

Por fortuna, si somos derrotados o caemos, no perderemos las monedas e ítems recogidos, Frogun tiene una importante capa de colectatón en cada nivel para conseguir ese 100%, que nos recompensará al conseguir distintos logros que serán representados por amuletos, verbigracia: tendremos un amuleto de mosca de bronce por completar el nivel, otro amuleto por superarlo antes del tiempo, otro por conseguir todas las monedas, otro por no morir, esto por mencionar algunos.

Lo anterior es bastante divertido, además de ofrecernos muy buena rejugabilidad y desafío para conseguir ese preciado 100%. Aunque, más allá de elevar el nivel de logros, no obtendremos algún beneficio adicional, más allá de alimentar nuestro ego.

El avance por el nivel en principio es lineal, aunque los recorridos son amplios al ofrecernos distintos caminos en los que podremos desviarnos para conseguir los ítems y monedas del nivel, por lo que ocasionalmente es posible perderse al no haber una señalización básica que nos indique el camino principal.

El mundo está dividido por cinco secciones que nos llevarán a distintos biomas temáticos y que iremos recorriendo desde un mapa mundial, en el que es necesario superar todos y cada uno de los niveles en orden para avanzar al siguiente.

En algunos niveles tendremos una carrera en contra de Jake, que nos retará a llegar en primer lugar al final del nivel, lo cual es bastante divertido y le da variedad a la aventura, aunque a momentos es un poco molesto competir con él porque los caminos suelen ser muy angostos, lo que nos provocará chocar con él.

Y para redondear la experiencia, el juego nos ofrece peleas contra jefes que refrescan gratamente la aventura, con patrones de ataque fáciles de dominar y que hacen satisfactorio el reto.

Asimismo, cuenta con un pequeño apartado local competitivo, en el que podremos competir contra un segundo jugador por ver quién logra conseguir la mayor cantidad de monedas jugando desde una perspectiva fija en un escenario simétrico, que logra entretener por un buen rato antes de volverse repetitivo, habría sido ideal que se pudiera jugar la campaña en cooperativo de alguna manera, para aquellos que jugamos acompañados del pequeño de la casa.

Gráficamente es encantador con su estilo poligonal

Molegato lo ha clavado con su estilo de arte pixelado perfecto que hace lucir a Frogun como un bello recuerdo retro, el movimiento de Renata es bastante fluido y derrocha encanto al estar recorriendo los variados niveles ricos en colores vivos, entre los biomas hay zonas boscosas, montañas nevadas e incluso volcanes calurosos, esto por mencionar algunos.

El diseño de niveles me ha gustado, principalmente porque incentiva la curiosidad a estar explorando cada recoveco en búsqueda de ítems y monedas, aunque como ya lo mencioné algunos saltos requieren precisión, ya que ciertas plataformas son bastante pequeñas, que con facilidad podremos saltar el salto.

Me ha encantado que cuenta con un sencillo modo foto, que nos permite movimiento libre y una serie de poses para Renata y conseguir la foto perfecta. Cabe mencionar que cuenta con una serie de filtros visuales que emulan el estilo de TV retro, CRT y de recreativas, sin embargo, quedan como algo anecdótico, ya que a título personal hacen que se vea muy mal el juego.

En la Nintendo Switch el juego corre a 30 fotogramas por segundo a una resolución de 1080p, mientras que en modo portátil va a 720p, con un rendimiento bastante bueno, durante mi experiencia no sufrí algún error que me afectara. Aunque cuenta con pantallas de carga previo a iniciar cada nivel de alrededor de 9 segundos, ya dentro del nivel el juego no requiere de carga alguna.

Su banda sonora complementa el viaje a la nostalgia

En lo musical corre a cargo del compositor australiano Altered Ego que nos ofrece una serie de composiciones en estilo 16-bit que logra replicar ese atractivo noventero al que nos sumerge de lleno, sabiendo inyectarle adrenalina en las batallas contra jefes para transmitir tensión.

Los efectos de sonido están muy bien implementados a darnos esa buena retroalimentación al coger enemigos o realizar saltos, incluso al ser golpeada Renata tiene esa respuesta vocal.

El juego no cuenta con actuaciones de voz, los personajes hablan por medio de cuadros de texto y emiten pequeños balbuceos que representan sus diálogos. En los textos y subtítulos nos ofrece una buena localización al castellano, aunque el tamaño no se puede modificar, es competente para la lectura.

*De acuerdo con nuestra política, informamos a nuestros lectores que este título ha sido jugado gracias al envío de una copia de prensa por parte de PLAION España. Se jugó actualizado a la versión 1.5 en la Nintendo Switch.

FROGUN análisis
FROGUN
Un digno homenaje a la época de la N64
Frogun es un plataformero que apunta a la precisión en su desafío, resultando ser una experiencia verdaderamente satisfactoria al replicar el estilo retro de la Nintendo 64 y su buena capa de coleccionables que nos hacen rejugar la aventura para aspirar al preciado 100%. Su narrativa cumple sin ir más allá al darnos un noble objetivo mientras acompañamos a Renata y su simpática pistola rana. Gráficamente rebosa de encanto poligonal y un diseño de niveles que constantemente pone a prueba nuestra habilidad, aunque frustra un poco que los puntos de control estén demasiado alejados uno del otro.
9
Épico