Una buena conexión es sinónimo de diversión
[dropcap]E[/dropcap]n los últimos años tener conexión a internet se ha convertido en una necesidad de primer grado en todos los hogares. Actualmente, en casi todos los dispositivos de ocio de los que disponemos es necesario disponer de una conexión a internet para tener un funcionamiento correcto, ya sea para que su software esté actualizado o para que sus aplicaciones puedan funcionar correctamente y se puedan explotar todas sus funcionalidades.
Lo mismo pasa en el área de los videojuegos. En la actualidad, todas las videoconsolas la necesitan, ya sea para disponer de las actualizaciones de software más avanzada o jugar a videojuegos que incorporan modos multijugador en línea o simplemente requieren conexión a internet, descargando las actualizaciones o parches de rendimiento más actuales. En el mercado existe una larga lista de videojuegos con los que es necesario disponer de Internet en casa para disfrutar de ellos al 100% o simplemente jugar a sus modos de juego multijugador.
Algunos de los más famosos del mercado son: League of Legends como uno de los MOBAS más famosos, o los Battle Royale, Fortnite de Epic Games o APEX de Electronic Arts. Tampoco podemos olvidarnos de Final Fantasy XIV: A Realm Reborn o World of Warcraft entre los MMORPG de más prestigio, o el mismísimo Red Dead Redemption 2 Online como opción de videojuego multijugador línea.
Fibra o ADSL
Pero para disfrutar de todos estos títulos es necesario que dispongamos de una buena conexión a Internet y sobre todo que sea de Fibra óptica. Como muchos sabemos, los operadores de telefonía suelen ofertar dos tipos de conexión a internet: ADSL y fibra óptica simétrica. La primera de ellas prácticamente ya está desuso, aunque aún existen compañías que por motivos de cobertura siguen ofertando este tipo de conexión.
En cambio, la conexión por fibra óptica se trata de una conexión mucho más estable y rápida para quienes necesiten una mayor velocidad. Sin embargo, dentro de ellas también nos podemos encontrar con dos tipos, la que nos llega por medio de un cable coaxial, y la que llega hasta el router mediante fibra óptica. La segunda de las opciones es la más idónea por varios motivos: En primer lugar nos encontramos que a la instalación no le afecta las interferencias electromagnéticas, es más segura y no está compartida con los vecinos. Por lo que todo apunta que la mejor opción se trata de la instalación de fibra óptica en el hogar.
En cuanto a las velocidades nos encontramos que en nuestro país existen compañías que disponen de velocidades de entre 50mb hasta 1gb de descarga. Aunque a la hora de jugar online no solo nos tenemos que fijar en la velocidad de subida de datos o de bajada, sino también en la latencia o ping.
La latencia es la clave
La latencia es uno de los detalles a tener en cuenta a la hora de valorar una conexión a internet para jugar. Se trata del tiempo en milisegundos que se tarda en establecer la conexión local con otra remota, o lo que es lo mismo, el tiempo que tarda en ser efectiva una acción que realicemos en el dispositivo del otro jugador. Como norma general algunos juegos requieren un ping de entre 100 y 150 ms, aunque lo recomendable es tenerlo bastante más bajo y así evitar problemas de lag (retrasos) mientras jugamos.
En definitiva, antes de contratar un operador de internet siempre es recomendable saber lo que tipo de producto estamos adquiriendo. Aunque para jugar online no se necesite una gran velocidad, si recomendamos que os fijéis en detalles como la velocidad de bajada, de subida, la comprobación del ping, mediante un test de velocidad, o hacer una estimación de cuantos dispositivos tendremos conectado simultáneamente en el router. De ser así, en muy pocas ocasiones nos llevaremos sorpresas mientras nos divertimos jugando online a nuestros videojuegos favoritos.